La mosca del mediterráneo, cuyo nombre científico es ceratitis capitata, es un insecto de color amarillo rojizo que impide la comercialización de frutas y vegetales. Además, afecta a cultivos como aguacate, naranjas, limones, mandarinas y tomates.

A causa de la proliferación de la plaga los destinos de las exportaciones dominicanas imponen veda o prohibiciones y evitar su propagación. Solo hasta junio del 2023, República Dominicana exportó 905,690 toneladas métricas de productos agrícolas por un valor de US$ 1,650.3 millones.

En Los Corales de Punta Cana se detectó la mosca mediterránea de la fruta, poniendo en peligro los cultivos de la zona Este y su propagación hacia el sector agrícola dominicano.

El Ministerio de Agricultura acude cada semana a verificar, si se atrapa una mosca se lleva al laboratorio y se realizan los estudios para detectar su variante.

"No somos capaces de impedir que lleguen al país, pero sí impedir su propagación. Cuando se detecta en los cultivos frutales, algunos socios comerciales ponen restricciones, afectando al sector exportador”, expresó el titular de Agricultura, Límber Cruz.

“Tenemos un cerco que no permite que se extienda a todo el territorio nacional, solo se enfoca en Punta Cana y hasta ahora la plaga no ha afectado nada porque no está en una zona de producción agrícola”, explicó.

De acuerdo con el funcionario, en la zona de Punta Cana se contabilizan 34 trampas de las 1,919 registradas a nivel nacional. Más de 400 vuelos y barcos entran y salen de República Dominicana, lo que significa que “las plagas no pagan pasajes ni atraviesan los regímenes aduaneros”.

“Somos un gobierno transparente y he escuchado en los medios que estamos ocultando información, pero nosotros activamos el protocolo para su erradicación”, aseguró.

Según el funcionario, el sector agropecuario está libre de la mosca del mediterráneo, sin embargo, reconoció la ocurrencia de brotes. En 2017, el Estado sufrió pérdidas por la propagación de este insecto.

Además, la seguridad alimentaria es un tema de interés nacional que une a los organismos que trabajan a favor de la agricultura y, que a la vez, se pueda contrarrestar las amenazas de los cultivos por las plagas, enfermedades u hongos que ponen en riesgo la viabilidad de los alimentos.

Conforme el Cruz, los productores “deben tener fe”, porque la entidad estatal tendrá el rol de prevenir, detectar y capturar antes de que sea diseminada a nivel nacional. “Se debe destinar todo el esfuerzo necesario y no escatimamos esfuerzos para mantener controlada y erradicar la mosca”, acotó el funcionario.