El euro bajó hoy hasta 1,0650 dólares tras la publicación de datos que muestran que la actividad económica se expandió en EEUU en febrero y en un entorno de aversión al riesgo por las tensiones geopolíticas.
El euro se cambiaba hacia las 16.00 horas GMT a 1,0683 dólares, frente a los 1,0692 dólares en las últimas horas de la negociación europea del mercado de divisas de la jornada anterior.
El Banco Central Europeo (BCE) fijó el cambio de referencia del euro en 1,0664 dólares.
La visita del presidente estadounidense, Joe Biden, a Ucrania ha desencadenado preocupación porque muestra que EEUU sospecha que China quiere suministrar apoyo militar a Rusia.
Los datos económicos de la zona del euro no pudieron impulsar la cotización de la moneda única.
"El crecimiento económico de la zona euro se acelera hasta su máxima de nueve meses en febrero", sobre todo por el sector servicios, observa S&P Global (antes IHS Markit).
El flash del índice compuesto de la actividad total de la zona del euro, del sector manufacturero y servicios, se situó en 52,3 puntos en febrero (50,3 puntos en enero), máxima de los nueve últimos meses.
Pero el índice de gestores de compras del sector manufacturero de la zona del euro se situó en 48,5 puntos (48,8 puntos en enero), mínima de los dos últimos meses.
Tanto Francia como Alemania regresaron a territorio de crecimiento por primera vez desde octubre y junio del año pasado respectivamente.
En Alemania se produjo el segundo incremento mensual consecutivo de la actividad del sector servicios y la primera expansión de la producción manufacturera desde mayo de 2022.
La confianza inversora subió de nuevo en Alemania en febrero, por quinto mes consecutivo, debido a que mejoran las expectativas de beneficios de los sectores de la energía y exportadores, así como de áreas económicas relacionadas con el consumo.
El mercado inmobiliario se debilitó más en EEUU enero, por duodécimo mes consecutivo, ante la subida de los tipos de interés hipotecarios.
Pero la actividad económica mejoró en EEUU en febrero y crece, también por el impulso del sector servicios, según datos S&P Global.
La moneda única se cambió en una banda de fluctuación entre 1,0644 y 1,0695 dólares.