En la República Dominicana se perpetran cada mes alrededor de 30 mil intentos de ciberataques; sin embargo, solo se registran dos incidentes de este tipo en los últimos dos años, se afirmó hoy en el desarrollo de un seminario sobre ciberseguridad en el Banco Central.

Estas cifras tan bajas contrastan con las de otros países donde las amenazas cibernéticas se han incrementado, sobre todo tras la invasión de Rusia a Ucrania, y se han enfocado en aquellas naciones que han declarado su apoyo al llamado “granero del mundo”; es decir, al país invadido.

En el 2021, estas amenazas crecieron en un 600% en relación al 2020 a nivel mundial y de este porcentaje América Latina y el Caribe recibieron 289 mil millones de intentos de ciberataques, para un 10%. En República Dominicana, Argentina y Colombia se detectaron , por ejemplo, intentos de instalar herramientas de minería de criptomonedas.

Estos datos fueron ofrecidos por expertos del comité técnico del Consejo Nacional de Cirberseguridad durante el seminario dirigido a periodistas “Ciberseguridad: panorama global y amenazas locales”, realizado en el Banco Central.

De acuerdo con Cesar Novo, uno de los expertos, el sector financiero es el más atacado, seguido de la venta minorista, agricultura/manufactura y el gubernamental.

Modificar ley 53-07

Durante el seminario se abordó la necesidad de que sea modificada la Ley No. 53-07 sobre Crímenes y Delitos de Alta Tecnología, que data del año 2007.

La magistrada Esther Agelán Casasnovas consideró que desde el año 2007 a la fecha la tecnología ha evolucionado y han surgido nuevas ciberconductas que requieren ser tipificadas por la ley.

Entre estas ciberconductas mencionó el Ciberacoso o Ciberstalking, Sexting no consentido o transmisión de imágenes no consentidas, Grooming y los delitos de odio o xenofobia.

Indicó además que se necesita agregar a la ley el Ciber Patrullaje, la investigación bajo reserva, envío de mensajes con contenido malicioso, entre otros.

Riesgos cibernéticos

La protección de activos de información es lo que se conoce como la ciberseguridad, cuyos pilares son la confidencialidad, la integridad y la disponibilidad. Cuando se está ante la probabilidad de que se materialice una amenaza que afecte estos activos, entonces se habla de un riesgo cibernético.

Según Novo, cuando se habla a su vez de un intento de acceso sin autorización a un activo de información, con el fin de comprometer la confidencialidad, integridad o disponibilidad de la información, se trata de un ciberataque.

Estos ciberataques son cometidos por delincuentes organizados o bandas criminales, hackers o actores patrocinados por Estados, hackers motivados políticamente como los llamados hacktivistas o colaboradores descuidados o inconformes.