El precio del petróleo intermedio de Texas (WTI) cerró este martes con una subida del 1,57 % y se situó en US$ 71.19 el barril, presionado por las tensiones geopolíticas en Medio Oriente.
Al término de la jornada en la Bolsa Mercantil de Nueva York (Nymex), los contratos de futuros del WTI para entrega en octubre sumaron US$ 1.10 con respecto a la sesión anterior.
El crudo de referencia en Estados Unidos subió tras una operación a gran escala atribuida a Israel, que provocó la explosión simultánea de cientos de aparatos buscapersonas en manos de miembros del grupo chií Hizbulá en varios puntos del Líbano, matando a al menos nueve personas e hiriendo a 2,800.
Entretanto, ya prácticamente se ha reanudado toda la producción de petróleo y gas natural por parte de las empresas estadounidenses el Golfo de México tras el paso del huracán Francine la semana pasada.
Según los analistas, el mercado de energía cuenta con la previsible bajada de los tipos de interés que dictará mañana la Reserva Federal, y la incógnita es la magnitud.
La bajada de los tipos de interés es acogida como una buena noticia porque puede favorecer la actividad económica y, por ende, la demanda de energía.
El valor del Texas ha bajado cerca del 12 % en los últimos tres meses, lastrado por unos peores pronósticos sobre la demanda global y por los datos económicos flojos de China, un gran consumidor.
En otros mercados, los contratos de gas natural para entrega en octubre subieron a US$ 2.42 por mil pies cúbicos y los contratos de gasolina con vencimiento en el mismo periodo subieron a US$ 1.99 el galón.