El precio del petróleo intermedio de Texas (WTI) abrió este jueves con un alza de 0.31 %, en US$ 76.88 el barril, en una semana de escaso movimiento en el precio, pero los contratos de futuros del WTI para entrega en marzo sumaban US$ 0.24 con respecto al cierre de la sesión anterior.
El factor que más puede pesar en estos compases de apertura son los datos conocidos hoy de la Agencia Internacional de Energía (AIE), que indican que la demanda global de petróleo se desacelerará este año, con un crecimiento previsto de 1.2 millones de barriles diarios frente al aumento de 2.3 millones de 2023.
El año pasado terminó con una demanda media de 101.8 millones de barriles diarios y en 2024 se prevé que alcance los 103 millones, señaló la AIE en su informe mensual sobre el mercado de petróleo. Esta tendencia al menor crecimiento de la demanda durante este año sigue a la ralentización ya registrada en el cuarto trimestre del año pasado.
Pero la presión bajista que pueden suponer las previsiones de la AIE se compensan en cierto modo con las tensiones geopolíticas, según el portal MarketWatch.
En Gaza, mientras todo el mundo aguarda el asalto a la ciudad de Rafah por parte de Israel, los combates se recrudecen también en la frontera entre Israel y Líbano, donde ayer murieron 11 civiles libaneses por fuego israelí, la mayor cifra de víctimas de los últimos meses en esta zona.
Esta zona fronteriza vive su mayor pico de tensión desde 2006, con un intenso intercambio de fuego durante más de cuatro meses que se ha cobrado la vida de al menos 278 personas, la mayoría en el lado libanés y en las filas de Hizbulá, que ha confirmado unas 199 bajas en sus filas, algunas de ellas en Siria.