El precio del petróleo intermedio de Texas (WTI) cerró este viernes con una profunda caída del 5,7 % y se situó en 78,74 dólares, por debajo de los 80 dólares el barril por primera vez desde enero.
Al finalizar las operaciones en la Bolsa Mercantil de Nueva York (Nymex), los contratos de futuros del WTI para entrega en noviembre restaron 4,75 dólares con respecto al cierre anterior.
Los inversores están de nuevo preocupados por la amenaza de una recesión global y las subidas de los tipos de interés ejecutadas por diferentes bancos centrales.
El petróleo de referencia estadounidense, que el jueves cerró en positivo impulsado por el aumento de las tensiones entre Rusia y Ucrania, terminó la semana con una gran pérdida acumulada, del 7,8 %.
El temor por una posible recesión mundial se ha hecho más palpable en los inversores después de que el miércoles la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) subiera los tipos de interés 75 puntos básicos hasta una horquilla entre el 3 % y el 3,25 %, el nivel más alto en los últimos 14 años.
Asimismo, el Banco de Inglaterra subió un día después en 0,50 puntos porcentuales los tipos de interés en el Reino Unido, hasta el 2,25 %, su nivel más alto desde diciembre de 2008.
Los inversores temen que la agresividad de los bancos centrales afecte al gasto de los consumidores, incluyendo los combustibles, y que a nivel general lleve a la economía a una recesión.
No obstante, sigue habiendo en juego muchos factores alcistas, como la guerra de Ucrania, el bloqueo del acuerdo nuclear con Irán que está vinculado al regreso del petróleo iraní a los mercados internacionales y la posibilidad de que los países de la OPEP reduzcan su bombeo en un momento de tenso equilibrio entre la oferta y la demanda.
Los contratos de futuros de gas natural para octubre restaron 26 centavos de dólar, hasta 6,82 dólares, y los de gasolina con vencimiento el mismo mes perdieron 13 centavos, hasta los 2,38 dólares el galón.