El precio del petróleo intermedio de Texas (WTI) bajó este lunes un 4,8 % y se situó en 93,89 dólares el barril, debido a los bajos datos de fabricación de China y Japón presentados hoy que pesan sobre las perspectivas de la demanda de oro negro.

Al finalizar las operaciones en la Bolsa Mercantil de Nueva York (Nymex), los contratos de futuros del WTI para entrega en septiembre descendieron 4,73 dólares con respecto al cierre anterior.

El índice gerente de compras de China (PMI, indicador de referencia del sector industrial) que elabora la compañía británica de información económica IHS Markit pasó de 51,7 puntos en junio a 50,4 en julio, según las cifras publicadas este lunes.

El dato queda lejos de lo vaticinado por los analistas, que predecían que llegaba a 52 puntos.

Por su parte, la actividad manufacturera japonesa llegó a su tasa más débil en 10 meses en julio, según mostraron los datos este lunes.

Las fábricas de Asia tuvieron problemas en julio debido a que la demanda global decayó y por las estrictas restricciones de China por nuevos brotes de la COVID-19 que desaceleraron la producción.

El próximo miércoles, la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y aliados liderados por Rusia, conocidos como OPEP+, se reunirán en Viena.

"La OPEP+ insinuó que pueden acelerar los aumentos de sus objetivos de producción colectiva", indica hoy el analista Tom Essaye, en un informe de la firma Sevens Report.

El posible aumento llegaría después de que el presidente estadounidense, Joe Biden, fuera a Arabia Saudí el mes pasado con la esperanza de llegar a un acuerdo para abrir los grifos del oro negro.

Los contratos de futuros de gas natural para septiembre ganaron 5 centavos de dólar, hasta 8,28 dólares, y los de gasolina con vencimiento el mismo mes restaron 11 centavos, hasta 2,99 dólares el galón.