El precio del petróleo intermedio de Texas (WTI) abre la semana con una nueva caída del 2,67 %, hasta los 82,84 dólares el barril, con las preocupaciones por la caída de la demanda internacional como protagonistas de la mañana junto a un dólar que continúa fuerte.
A las 09.00 hora local de Nueva York (13.00 GMT), los contratos futuros del WTI para entrega en octubre restaban 2,27 dólares con respecto al cierre de la sesión anterior.
El petróleo de referencia estadounidense amaneció este lunes en rojo con la mirada de los inversores puesta en la reunión de esta semana de la Reserva Federal (Fed) estadounidense y su política agresiva para detener la inflación.
Los analistas temen que los fuertes aumentos en los tipos de interés puedan frenar el crecimiento mundial y por lo tanto afecten a la demanda de los combustibles.
Otra razón que está afectando negativamente a la cotización del crudo es un dólar estadounidense cada vez más fuerte, lo que encarece el petróleo para los compradores que utilizan otras monedas.
La semana pasada, la Agencia Internacional de la Energía (AIE) revisó ligeramente a la baja sus previsiones sobre la demanda global de petróleo para este año, en concreto 110.000 barriles diarios menos que hace un mes.
Sin embargo, la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) aseguró que la demanda mundial de petróleo en 2022 y 2023 será más fuerte de lo previsto debido a que a las principales economías les está yendo mejor de lo esperado a pesar de desafíos como el aumento de la inflación.