El caso de una viuda que canceló el préstamo de una yipeta adquirida por su esposo fallecido en un banco de tamaño mediano evidencia un problema recurrente en las relaciones entre los bancos y los herederos de clientes fallecidos: la complejidad de los trámites para acceder a bienes y documentos. Tras saldar la deuda, el banco condicionó la entrega de la matrícula del vehículo a la presentación de un poder notarial firmado por todos los hijos del cliente fallecido, un procedimiento que, aunque legalmente válido, resulta engorroso y costoso para los familiares.

Este tipo de situaciones no es aislado. Muchos herederos enfrentan procesos prolongados, confusos y costosos para gestionar cuentas bancarias, préstamos y otros productos financieros de clientes fallecidos. La falta de procedimientos claros y estandarizados por parte de las instituciones financieras, sumada a la necesidad de realizar trámites legales adicionales como poderes notariales o autorizaciones judiciales, genera frustración y gastos innecesarios para los familiares.

¿Qué pueden hacer los herederos?

Antes de iniciar cualquier trámite, los herederos deben solicitar al banco un detalle completo de los requisitos necesarios. Esto evita confusiones y ayuda a planificar los pasos a seguir.

Es recomendable buscar asesoría legal de un abogado con experiencia en sucesiones y temas bancarios. Esto asegura que los trámites se realicen correctamente desde el principio.

Si hay varios herederos, obtener un poder notarial firmado por todos y debidamente legalizado puede facilitar los trámites, aunque esto implique un gasto inicial.

Registrar la Declaratoria de Herederos, este es un paso esencial, ya que permite a los familiares ser reconocidos formalmente como herederos legales ante las instituciones financieras y otras entidades.

Recomendaciones a los Bancos

Los bancos también tienen un rol clave para hacer que estos procesos sean menos complicados para los herederos. Es fundamental que las instituciones financieras desarrollen políticas más accesibles y empáticas para tratar casos de clientes fallecidos. Algunas recomendaciones incluyen:

Crear procedimientos internos claros para la entrega de bienes o documentos a herederos, reduciendo la necesidad de trámites externos innecesarios.

Ofrecer servicios legales básicos a los herederos, como la redacción de documentos de representación, para ahorrar tiempo y dinero a los familiares.

Asegurarse de que los empleados bancarios estén capacitados para ofrecer información clara y precisa sobre los procedimientos requeridos.

Implementar políticas más flexibles para casos especiales, como aquellos en los que los herederos enfrentan barreras económicas o logísticas.

En cuanto a la Superintendencia de Bancos

La Superintendencia de Bancos tiene un papel fundamental para garantizar que los trámites relacionados con los clientes fallecidos sean más eficientes y accesibles. Una recomendación clave sería la creación de una normativa que instruya a las instituciones financieras a establecer procedimientos estandarizados y simplificados para la entrega de bienes y documentos a herederos. Esto incluiría la posibilidad de que los bancos elaboren poderes notariales internos, firmados por los herederos en presencia de un notario, evitando la necesidad de trámites adicionales en otras instituciones.

Además, la Superintendencia podría promover la creación de una plataforma digital centralizada donde los herederos puedan registrar su condición y gestionar los documentos requeridos de forma más ágil, minimizando costos y tiempo. Estas medidas no solo beneficiarían a los clientes, sino que también fortalecerían la transparencia y eficiencia del sistema financiero en su conjunto.

Tu consultorio financiero es una columna desarrollada por Jesús Geraldo Martínez sobre finanzas personales, para orientar a las personas con conocimientos básicos en finanzas y economía a mejorar su entendimiento. Para consultar con el autor puede escribir al correo jesusgeraldo@tuconsultoriofinanciero.com, o en Instagram @Jesusgeraldomartinez.