La semana pasada el Banco Central de la República Dominicana, tomó de manera acertada, tres iniciativas de política monetaria que permitirán el financiamiento a los sectores productivos y los hogares en condiciones más favorables.

La primera iniciativa, consistió en disminuir la tasa de política monetaria (TPM) en 50 puntos básicos, de 8.50 % a 8.00 %, y a la vez dar señales de que dicha tasa irá disminuyendo gradualmente en lo que resta del año 2023.

La segunda, en la liberación de recursos del encaje legal por unos RD$ 34,000 millones, equivalentes al 2 % del pasivo sujeto a encaje, para ser canalizados como préstamos a los sectores productivos y hogares, a través de los bancos múltiples, asociaciones de ahorros y préstamos y demás intermediarios financieros, a una tasa de interés de hasta 9 % anual, con vigencia de cuatro años.

La tercera, la creación de una nueva facilidad de liquidez rápida (FLR) por RD$ 60,000 millones, con el objetivo de proveer de liquidez adicional al sistema financiero y facilitar el financiamiento al sector privado, a una tasa de interés no mayor al 9 % anual por dos años. El Banco Central otorgará estos recursos a las entidades de intermediación financiera a una tasa de interés de 3 % anual, garantizados con valores emitidos por el Banco Central y el Ministerio de Hacienda.

Estos nuevos estímulos monetarios junto al inicio de la reducción gradual de la tasa de política monetaria tendrán un impacto favorable en la economía entre los cuales podemos citar los siguientes efectos:

  1. Al reducirse el costo del dinero prestado, las tasas de interés más bajas alentarán el consumo de las personas y la inversión en nuevos proyectos de las empresas.

Los consumidores podrán tomar préstamos para financiar compras importantes, como viviendas y automóviles, lo que impulsa la demanda y estimula la actividad económica. De igual manera, podrán financiar sus vacaciones lo que favorecerá el turismo interno.

Del mismo modo, las empresas de los diferentes sectores económicos pueden aprovechar tasas de interés más bajas para financiar proyectos de expansión y mejorar su capacidad productiva.

  1. Las tasas de interés más bajas aumentarán la demanda de viviendas, ya que los costos hipotecarios se reducen. Esto puede llevar a un aumento en el precio de las propiedades y estimular la construcción de viviendas, lo que a su vez beneficia al sector de la construcción y a sectores relacionados.

 

  1. Estímulo en el mercado de valores, cuando las tasas de interés caen, los inversores pueden buscar mayores rendimientos en otros activos financieros, como títulos del Banco Central, bonos soberanos del Gobierno Dominicano, títulos del Ministerio de Hacienda, bonos corporativos, fondos de inversión, y acciones. Esto puede llevar a un aumento en los precios de los activos y a un mayor apetito por el riesgo en los mercados financieros.

 

  1. Estímulo a las exportaciones e importaciones de bienes, ya que estas empresas podrán acceder a tasas de interés más baja que favorecerá el dinamismo de estos sectores, la producción y el comercio en general.

 

  1. Las tasas de interés más bajas pueden alentar a las personas con préstamos podrán refinanciar sus deudas existentes a tasas más bajas. Esto puede liberar más ingresos disponibles para el consumo y ayudar a reducir la carga de la deuda de los hogares y las empresas.

 

  1. Para las personas que viven de los intereses de sus ahorros e inversiones, las bajas en las tasas de interés tendrán efectos negativos en la disminución de los ingresos actuales que perciben para vivir.

 

  1. Para los que esperan que las bajas en las tasas de interés tendrán un impacto en la depreciación del tipo de cambio, que se olviden de eso, porque el Banco Central ha demostrado que la estabilidad del tipo de cambio ha sido un factor clave en la estabilidad de los precios internos y de tener una inflación acotada.

Para las entidades bancarias, los nuevos estímulos monetarios favorecerán a las entidades de intermediación financiera de mayor tamaño, que son los que percibirán el mayor monto del encaje legal por su participación mayor en los depósitos del público, y a la vez, son las que tienen tesorería muy activa y podrían disponer de títulos del Banco Central y del Ministerio de Hacienda para colocarlos en garantía para poder acceder a la nueva facilidad de liquidez por un monto de RD$ 60,000.00 millones.

 

Para los bancos medianos y pequeños, la reducción de las tasas de interés podría tener los impactos siguientes:

  1. Menores ingresos por intereses, cuando las tasas de interés bajan, los bancos generalmente experimentan una disminución en los ingresos generados por los préstamos que otorgan. Esto se debe a que los préstamos existentes tienen tasas de interés más altas y los nuevos préstamos se originan a tasas más bajas.

 

  1. Reducción de márgenes de interés, los bancos obtienen beneficios al cobrar tasas de interés más altas a los prestatarios de lo que pagan a los depositantes. Con tasas de interés más bajas, esta diferencia, conocida como margen de interés, se reduce, lo que afecta la rentabilidad de los bancos.

 De hecho, los nuevos estímulos monetarios fijan en un 6% de margen de intereses y muchas entidades bancarias tienen costos operativos que superan este porcentaje. En el caso de los bancos medianos y pequeños, deberán reducir las tasas de interés activas si quieren prestar, y mantener las actuales tasas pasivas en aras de retener los depósitos de sus clientes.

  1. Posible disminución en el volumen de depósitos, al reducirse las tasas de interés, los depositantes pueden buscar alternativas en los instrumentos del mercado de valores, lo que impactará hacia la baja el volumen de depósitos de las entidades bancarias medianas y pequeñas, al menos que decidan ofrecerles una tasa de interés pasiva mayor para mantener los depósitos de sus clientes.

Es importante tener en cuenta que el impacto de las bajas tasas de interés, que se producirán gradualmente en lo que resta del año 2023 puede variar según la entidad bancaria, además, existen otros factores, como la capacidad gerencial del banco  alternativas de fuentes externas de financiamientos, la competencia del mercado, la concentración por nichos de clientes, y así como también, las regulaciones más favorables que tienen las cooperativas de ahorro y crédito, las cuales tienen un importante parte de pastel del mercado de préstamo y de depósitos del público.

Finalmente, saludamos las iniciativas que ha tomado el Banco Central de la República Dominicana para empezar a dinamizar la economía, siendo el primer Órgano Rector de la Política Monetaria que ha dado este paso de empezar a bajar su tasa, en la región del caribe, Latinoamérica, y otras latitudes que siguen luchando con el flagelo de la inflación y que por el momento deberán esperar algunos meses más para empezar a disminuir sus tasas de política monetaria.

La columna “La Banca Dominicana por Dentro”, es desarrollada por Jesús Geraldo Martínez, en el interés de aportar al fortalecimiento del Sistema Financiero Dominicano desde una perspectiva analítica y práctica orientada a la formación de conocimientos y divulgación de informaciones exclusivas de dicho sector. Para contactar con el autor. Email jgmartinez20@icloud.com, o seguir a @Jesusgeraldomartinez en Instagram.