El secretario de Estado de EEUU, Antony Blinken, destacó la participación dominicana en la nueva cadena de suministros que se construye en reemplazo de la que se va desplomando con la pandemia y la guerra en Ucrania, la misma que requiere, dijo, de "resiliencia" para tejerse con "nuevas líneas de desarrollo económico en democracia", asunto que centrará buena parte de la agenda de la Cumbre de las Américas de junio, que reunirá en Los Ángeles a mandatarios del continente.

La IX Cumbre de las Américas, que se celebrará en California del 6 al 10 de junio, será la segunda organizada por Estados Unidos después de la edición original en Miami en 1994, cuando impulsó la fracasada Área de Libre Comercio de las América (ALCA) que, en grandes rasgos, contempló abrir los mercados latinoamericanos a toda la oferta estadounidese en proporciones mucho más generosas que las permitidas para la entrada de los productos regionales en EEUU; es decir, democráticamente desbalanceada.

Ahora se trata, sostuvo Blinken, de "construir una resiliencia que exige medidas que hagan nuestra democracia más fuerte, como un todo. Ahora, déjenme comenzar por aquí, desde el grupo sobre cadena de suministros que EEUU está construyendo con México, que incluye poner especial foco en tecnología de la comunicación, hasta el estudio de nuevas líneas de desarrollo económico dentro de la democracia que están trabajando Costa Rica, República Dominicana, Panamá y EEUU para estrechar la cadena de suministros en áreas de salud, alimento, seguridad y tecnología", declaró.

Se trata, en definitiva, sostuvo, de ser "menos vulnerables en materia de acceso a los suministros que más necesitamos", porque la pandemia y la guerra de Ucrania (con Rusia) han dejado "la lección más dura" al respecto.

"Muchos de nosotros dimos esto por sentado por muchos años (acceso fácil y seguro a los suministros), pero ahora, de repente, nos damos cuenta de la fragilidad del sistema que construimos", insistió.

Pacto Migratorio

El secretario de Estado de EEUU, que se expresó así durante un almuerzo que tuvo lugar en el Departamento de Estado junto a empresarios e inversores del continente, congregados por la Americas Society,  adelantó que en la cumbre de Los Ángeles espera cerrar un pacto migratorio beneficioso para toda la región.

"Confío en que lograremos una declaración regional sobre migración en la próxima cumbre que beneficie a todos nuestros países, especialmente a la gente de la región", manifestó el jefe de la diplomacia estadounidense tras sostener que la crisis migratoria en el continente "no se puede abordar con soluciones a corto plazo" y reivindicó que el asunto deben atenderlo todas las "democracias" de la región.

Es por ello, señaló, que países claves en este sentido, como Estados Unidos, Colombia y Panamá, están impulsando la convocatoria de reuniones ministeriales dentro de la cumbre para explorar maneras de "apoyar a las comunidades que albergan grandes poblaciones de migrantes", así como mejorar la "seguridad fronteriza" y luchar contra el crimen transacional.

Migración. Bloque progresista-bloque conservador

Blinken subrayó la falta de oportunidades, la crisis climática y la inseguridad como principales impulsores de la migración, por lo que hizo un llamamiento a "trabajar juntos" para "crear las condiciones que faciliten el derecho (de las personas) a permanecer" en sus países.

El funcionario pidió a los países invitados a la cumbre que "eviten dividirse entre un bloque progresista y un bloque conservador", y les instó a que actúen como "democracias".

Cuba, Venezuela y Nicaragua

"Tenemos que demostrar que las democracias generan mejores resultados para la gente", dijo Blinken, quien criticó a los Gobiernos de Cuba, Venezuela y Nicaragua, a los que no ha invitado a la cumbre.

El secretario de Estado dijo que dichos países tienen "Gobiernos represivos que ofrecen un falso dilema entre el respeto a los derechos y la mejora del bienestar".