La República Dominicana está obligada a impulsar políticas de empleo verde, que favorezcan la evolución del país hacia una economía baja en carbono, expresó el vicepresidente ejecutivo del Consejo Nacional para el Cambio Climático y Mecanismo de Desarrollo Limpio, Max Puig.
“Necesitamos empleos verdes que mejoren la eficiencia energética y de las materias primas, que limiten las emisiones de gases de efecto invernadero, minimicen los residuos y la contaminación, protejan y restauren los ecosistemas y apoyen las políticas de adaptación al cambio climático, dijo Puig.
El funcionario se expresó en estos términos en el taller “Diálogo y socialización de la Evaluación Situacional Rápida sobre el potencial para la Transición Justa y Empleos Verdes en República Dominicana”.
En ese escenario, Puig llamó a las entidades y empresas del país de trabajar juntos bajo una hoja de ruta que permita encaminar el sistema socioeconómico hacia una producción sostenible.
Las formas de producción en República Dominicana siguen ancladas en el uso de combustibles fósiles, siendo urgente la transición hacia el uso de fuentes de energía renovables.
Los empleos verdes reducirán considerablemente los riesgos laborales y deberán proporcionar ingresos adecuados, protección social, condiciones de trabajo seguras y diálogos sociales efectivos, señaló Puig durante el diálogo coordinado por la Organización Internacional de Trabajo (OTI) y el Programa de las Naciones Unidas (PNUD