La Isla Saona funciona ya al cien por cien con energía renovable, gracias a una planta puesta en marcha estos días y que ofrece suministro eléctrico continuo a uno de los lugares más turísticos de República Dominicana hasta ahora sin luz y sin agua potable.

La Compañía de Electricidad de Bayahíbe (CEB) es la artífice del desarrollo y la puesta en servicio de la central de Saona, que se convierte así en la primera y única isla del hemisferio con el 100 % de energía renovable.

Según explica la CEB, empresa subsidiaria del Consorcio Energético Punta Cana–Macao (CEPM), esta planta tiene una capacidad inicial de almacenamiento de 5 megavatios hora (MWh) que "podría ampliarse en función del desarrollo económico y social de la comunidad".

Está integrada por una estructura de módulos fotovoltaicos que almacenan la energía en sofisticadas baterías y que proporcionan servicio eléctrico las veinticuatro horas del día en esta isla.

Mejor calidad de vida y beneficios económicos

Ello mejorará la calidad de vida de los más de 600 residentes en Saona y su economía, ya que hasta ahora la falta de energía en negocios y restaurantes solo permitía estar un máximo de cuatro horas al millón de turistas que cada año visitan esta isla de 110 kilómetros cuadrados.

“Estoy muy contenta con el proyecto de CEB. Creía que a mi edad no vería este avance de la luz. Ahora puedo ver la televisión, encender el abanico o usar la plancha”, comenta Bienvenida Díaz, de acuerdo con una nota de la empresa.

En el mismo sentido se manifiesta Mercedes Rodríguez, a quien la llegada de la energía le ayudará en su negocio de fabricación de jabón al poder utilizar un molinillo eléctrico. “Con las máquinas todo es más sencillo. Ahora pondré en marcha lo que siempre había soñado”, afirma.

Se trata de un modelo que Rolando González Bunster, presidente de InterEnergy Group, casa matriz de CEPM y CEB, no descarta poder replicar en otras zonas de República Dominicana y en otras islas del mundo para favorecer el desarrollo de tecnología limpia y respetuosa con el medioambiente.

"Queremos que Saona sea el buque insignia para el desarrollo de otros proyectos similares en todo el país", subraya González Bunster.

Destaca los beneficios que la energía limpia proporcionará a Saona, entre ellos el acceso a agua pura potable, la movilidad eléctrica y la instalación de la cadena de frío, esencial para la pesca de la zona.

Controlar el consumo a través del prepago

A fin de que los habitantes de la isla tengan un mayor control de su consumo, el servicio se suministrará a través de un sistema de prepago.

El proyecto, ubicado en el área de Mano Juan, incluye además la creación de una red inteligente de módulos en distintos puntos del área habitable de la isla, junto con la corrección y mejora de la infraestructura eléctrica de más de 120 casas, negocios y locales comerciales en Saona.

Va acompañado también de la reestructuración de las infraestructuras eléctricas de la escuela y de la policlínica de la isla, que dispondrán de energía gratuita para un mejor funcionamiento.

Ante todos estos beneficios, los vecinos apoyan esta iniciativa, al igual que la Asociación Pro-Desarrollo de Saona, cuyo presidente, Eddy Quiñones, resalta la transcendencia del proyecto para la vida y actividad de los residentes, pues, considera, la llegada de la energía conllevará un crecimiento para la comunidad.

La CEB es una empresa subsidiaria del Consorcio Energético Punta Cana–Macao, firma generadora, distribuidora y comercializadora de energía eléctrica con treinta años de historia y que actualmente dispone de más de 300 MW de capacidad instalada.

A través de más de 1.200 kilómetros de redes de alta, media y baja tensión, suministra energía a más del 65 % de la oferta hotelera dominicana, lo que la convierte en un importante impulsor del desarrollo turístico de Punta Cana, Bávaro, Macao, Uvero Alto, Miches, Bayahíbe y La Romana.

La casa matriz de CEB, InterEnergy Group, es una de las mayores empresas de energía limpia de América Latina y el Caribe y opera plantas de generación eléctrica en República Dominicana, Panamá, Jamaica, Chile y Uruguay.