La viceministra de Cambio Climático y Sostenibilidad de República Dominicana, Milagros De Camps, demandó a la comunidad internacional en la Convención de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático (COP28) una acción decidida y un compromiso firme para movilizar recursos que permitan mantener el objetivo de un calentamiento global inferior a 1.5 grados centígrados y el acceso de los Estados en desarrollo a fondos para enfrentar desastres naturales.

"El camino a seguir exige una acción decidida y un compromiso firme para movilizar recursos", afirmó De Camps durante su discurso en el Segmento de Alto Nivel para Jefes de Estado y de Gobierno. "Nuestro compromiso compartido, acción colectiva y determinación inquebrantable pueden producir y producirán resultados positivos", añadió.

De Camps destacó la importancia de mantener la confianza en el cumplimiento de la meta del calentamiento global, ya que un aumento superior a 1.5 grados centígrados implicaría consecuencias devastadoras, como acumulaciones de lluvia e inundaciones que provocarían pérdidas de vida, daños millonarios en infraestructura y agricultura, huracanes más fuertes e imprevisibles, olas de calor recurrentes, reducción de la productividad laboral, impactos en la salud de la población y disminución de la calidad de vida.

La viceministra también resaltó que el calentamiento global conlleva sequías más largas y un aumento considerable de los incendios forestales, afectando la reserva forestal y los medios de vida de millones de personas que dependen de la pesca y el turismo. En ese sentido, hizo hincapié en que el cumplimiento del límite de 1.5 grados centígrados no es simplemente un objetivo de negociación, sino un límite físico respaldado por la ciencia.

República Dominicana lidera las negociaciones en la COP28 y está exigiendo a los países desarrollados un mayor financiamiento para hacer frente a los impactos del cambio climático. De Camps agradeció el compromiso de los países desarrollados, reconociendo que aunque las promesas son encomiables, no son suficientes en comparación con las pérdidas y daños experimentados por las naciones afectadas.