El colectivo Compas de la Diáspora, una organización conformada por artistas, docentes, feministas, escritores y trabajadores de origen dominicano en Estados Unidos, emitió una declaración condenando la represión contra campesinos y defensores del medio ambiente en Cotuí, República Dominicana.
El pasado 22 de enero, comunidades locales protestaron contra la explotación minera de Barrick Gold, denunciando su impacto ambiental en la región del Cibao.
Según el colectivo, el Estado dominicano actúa como cómplice en la represión y en la destrucción del entorno natural.
En su declaración, el colectivo señaló que el presidente Luis Abinader entregó 50,000 tareas de tierra a Barrick Gold mediante el decreto 270-22, favoreciendo políticas que calificaron de "pro-imperialistas".
También responsabilizaron a Juana Barceló, presidenta de Barrick en el país, y a Faride Raful, ministra del Interior y Policía, de cualquier acto de represión contra los manifestantes.
El colectivo cuestionó el rol de los "nacionalistas de extrema derecha", a quienes acusaron de no participar en luchas por la soberanía o la protección del medio ambiente.
Según la declaración, estas posturas nacionalistas solo justifican la violencia estatal contra comunidades negras y marginadas.
Finalmente, Compas de la Diáspora hizo un llamado a la solidaridad de la diáspora dominicana y a la atención internacional sobre la situación en Cotuí, reafirmando que "todas las luchas por la liberación están interconectadas".