El suministro de agua al Gran Santo Domingo está gravemente amenazado debido al agotamiento y la contaminación de los ríos Haina, Isabela, Mana, Duey y sus afluentes, que nacen en Villa Altagracia y abastecen a tres de los principales acueductos que suplen del líquido a millones de personas de la capital y de la provincia de Santo Domingo.

La advertencia se hizo este fin de semana en el marco de un seminario intersectorial que reunió a especialistas en medio ambiente y recursos naturales, académicos, empresarios, autoridades nacionales y lideres de los más diversos sectores del referido municipio.

Salvar las cuencas hidrográficas y las áreas protegidas de Villa Altagracia es una tarea urgente que requiere de un plan compartido entre el Gobierno Central, las autoridades municipales y las organizaciones sociales del municipio, según la conclusión del seminario: Recursos Naturales y Medio Ambiente, situación, retos y compromisos.

La actividad fue organizada por la Fundación por el Desarrollo de Villa Altagracia (FUDEVA) y congregó a 93 representantes de los más diversos sectores de ese municipio. También participaron dos viceministros y seis connotados especialistas en el tema.

Agotamiento y contaminación de las aguas, acelerado proceso de deforestación, daños graves a la flora y la fauna de los parques nacionales Los 7 picos, Novillero y Loma Humeadora y la debilidad de los organismos estales para enfrentar esta situación se mencionaron en el seminario como parte de un diagnóstico sombrío del municipio.

FUDEVA explicó que “dos de las principales fuentes de agua potable destinadas a satisfacer la demanda de la población del gran Santo Domingo están en Villa Altagracia: el acueducto Haina-Duey, que aporta un promedio de 27 millones de ganones diarios a varios acueductos que cubren a 25 sectores de Santo Domingo; y el sistema Isa-Mana, que aporta 11 millones de galones diarios de agua”.

A esto se agregan los significativos aportes que hace el río Isabela, que también nace en Villa Altagracia y que suple agua a varios municipios de la provincia de Santo Domingo.

Esos acueductos proveen el 35 % del agua que consumen la provincia de Santo Domingo y el Distrito Nacional. Sin embargo, la ciudad de Villa Altagracia no recibe suficiente agua por cañería desde hace 40 años.

Esto quiere decir que salvar y proteger nuestras montañas y nuestras cuencas hidrográficas es de alta prioridad para la capital y para el país y por tanto corresponde al Gobierno Central invertir lo que sea necesario en este asunto”, proclamó Jacobo Reyes, presidente de FUDEVA.

El viceministro de áreas protegidas del Ministerio de Medio Ambiente, Federico Franco, reconoció la gravedad del problema y coincidió con FUDEVA en la conveniencia de un pacto para el manejo compartido de las áreas protegidas de Villa Altagracia, que son indispensables para conservar las aguas que alimentan los ríos del municipio. Dijo que Medio Ambiente está en la disposición de trabajar inmediatamente en hacer ese acuerdo de co-manejo.

Por su parte, Domingo Matías, viceministro de Desarrollo Territorial del Ministerio de Economía, Planificación y Desarrollo, se comprometió a auspiciar un Plan de Ordenamiento Territorial que delimite el uso de la tierra a partir de su vocación forestal, agrícola y urbanística.

Se mostró impresionado por la unidad de todos los sectores de Villa Altagracia en la defensa de sus recursos naturales y especialmente de las aguas. “Esto debería ser replicado en todo el país porque el provenir dependerá mucho de la participación comunitaria en la gestión ambiental”, dijo.

La agenda del seminario permitió abordar los temas Situación de la Flora y la Fauna de Villa Altagracia, a cargo del biólogo y ex rector de la Universidad Evangélica Salustiano Mojica; situación de los recursos hídricos del municipio, abordado por Domingo Marte, escritor y maestro del la naturaleza; Eleuterio Martínez, presidente de la Academia de Ciencia, quien se refirió a la importancia de las áreas protegidas y de los ríos de Villa Altagracia.

El aprovechamiento del potencial ecoturístico de Villa Altagracia sin dañar las riquezas naturales si discutió con la participación del alcalde local, José Miguel Méndez y de los empresarios Jhonny Quiñones y José Medina.

Todos los expositores resaltaron las riquezas naturales del municipio y la urgencia de protegerlas. También ponderaron los esfuerzos de concertación que impulsa FUDEVA y la integración de las fuerzas vivas de la comunidad.