Los israelíes podrán asistir en noviembre al Mundial de Catar, país hasta ahora vetado a ciudadanos de Israel, según un acuerdo alcanzado entre su gobierno, el catarí y la FIFA.
"Después de un arduo trabajo de meses, tenemos una buena noticia para los fanáticos del fútbol: los israelíes podrán volar a Catar para ver los partidos de la Copa Mundial", informaron en un comunicado conjunto los Ministerios israelíes de Exteriores, Defensa y Deportes.
El gobierno israelí ha calificado el acuerdo como un importante "logro político", ya que Israel y Catar no tienen relaciones diplomáticas.
De hecho, el régimen catarí es uno de los mayores valedores de la causa palestina y mantiene buenas relaciones con sus facciones políticas, particularmente con el movimiento islamista Hamás, que gobierna la Franja de Gaza.
El gobierno catarí es además el intermediario para que lleguen a Gaza fondos de la ONU y acoge desde hace años al exiliado líder de Hamás, Ismail Haniye.
"Hoy presentamos otro logro político que llena el corazón de la afición. El amor por el fútbol y el deporte conecta a personas y países. El Mundial abre una puerta a unas nuevas relaciones cálidas entre nosotros", señaló el ministro israelí de Exteriores, Yair Lapid.
El ministro de Defensa, Benny Gantz, destacó que Catar es "un país de importancia internacional que contribuye a la estabilidad regional", por lo que deseó que "las visitas de israelíes fortalezcan el conocimiento entre los ciudadanos de ambos países".
"El deporte tiene el poder de cruzar continentes y conectar pueblos y naciones. Estoy feliz porque los hinchas israelíes podrán asistir a la mayor celebración mundial del fútbol", indicó el ministro israelí de Cultura y Deportes, Hili Trooper.
El mundial de Catar, para el que la selección israelí no logró clasificar, tendrá lugar entre el 21 de noviembre y el 18 de diciembre.
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