No hay manera de concluir de manera definitiva un trabajo sobre autores y autoras, en plena capacidad de crear, como ocurre con estos escritores y escritoras de Neiba y la provincia Bahoruco.
Esa es la razón por la que he calificado este cierre como una "conclusión provisional", porque en el momento en que escribo estas líneas hay creadores y creadoras fijando sobre el papel y en los espacios digitales, sus diferentes perspectivas de sentir y de ver su mundo, nuestro mundo.
Como humano, sé que he cometido y que cometré errores; pero otros eran enmendando los posibles vacíos que, de manera no intencional, iré dejando en el proceso.
Uno de esos errores míos, fue dejar para último al narrador (Tony Lulú), por lo que recorro sus huellas y miro, de manera crítica, su discurso narrativo.
La narrativa, dentro del amplio panorama literario nacional, tiene sus bases estéticas, no sólo en los pasos del maestro Juan Bosch (Juan Emilio Bosch y Gaviño (La Vega, 30 de junio de 1909 – Santo Domingo 1 de noviembre de 2001), Freddy Prestol Castillo (1914-1981) o Sócrates Nolasco (1884-1980), entre otros creadores de alto relieve creativo.
Las políticas culturales centralizadas en las zonas metropolitanas, cuando aparecen, han condicionado al desconocimiento de jóvenes escritores que están sin el apoyo estatal del Ministerio de Cultura.
En las provincias, por citar un caso de aislamiento cultural, hay jóvenes escritores y escritoras que la prensa nacional, en sus limitados espacios culturales, no recogen su nombre, y, peor, aún, no difunden sus obras, salvo este espacio, Acento.com.do que ha abierto sus puertas a la difusión de la creatividad y el pensamiento crítico en este país, ahí están las pruebas.
He aquí…hoy, una obra que, rompiendo esquemas de aislamientos, sobre los cayucos y las guazábaras, cubierta de sureñidad, desde su humor cotidiano y el tono coloquial y sarcástico, nos pone en alerta, ante la presencia de nuestros personajes populares, nos abre la memoria…para recordar aquellas vellaquerías barriales, en nuestros desnudos patios con rostros wa-wa-wa.
"Hasta que un día nos damos cuenta" (Edición de "Tiempo de Nosotros Editores", autor, Tony Rodríguez Labour, con diagramación y diseño de portada, a cargo de Harold Frías Maggiolo y la ilustración de la portada, a cargo de Edward Mariano Alcántara. República Dominicana, 2022).
Cuarentitres (43) cuentos, forman el cuerpo narrativo de esta obra, con sus bajas y sus altas, en la voz estética de su discursividad narrativa, con un manejo, a veces directo y seco, sobre los panoramas contextuales de los personajes, aunque esa es la realidad tangible de los ambientes sureños, convertidos en símbolos de angustias, pero con su picardía por dentro.
Hay un prólogo, bajo la firma del académico e investigador de la lingüística, doctor Bartolo García Molina, y tiene una dedicatoria "a los maestros Bartolo García Molina; Francisco Acosta, a Julio Cuevas y al pintor y escultor Edward Acántara.
Debo señalar aquí que, cuando supe de la publicación de este libro, le recomendé al autor, dividir esos cuentos y públicar tres (3) libros de y no un solo libro, y le argumenté, que hoy día, en este tiempo líquido…rápido y cambiante, la lectura de esos libros gruesos, salvo que provengan de "maestros"de la literatura, se quedan en los anaqueles.
Uno sugiere y los autores deciden su rumbo. Ya tenemos aquí la edición y nos disponemos a continuar nuestro diálogo con el libro y escuchar su voz, la expresión de sublengua, de su decir y la contextualización de sus sujetos-actuantes, situados en la vida misma del sujeto-autor y su interactuar natural, con su gente, con nuestra gente.
Es la experiencia vital del autor con los personajes que aquí hacen vida, lo que se ha convertido decir, para contarnos y adentrarnos en su ritualidad de convivencias de la vecindad y nuestro existir y ser feliz, a pesar de la angustia y del dolor, como marca de nuestra sureñidad y su trascendencia.
Creo que en lo adelante, a mí mismo y a nuestros creadores, nos hace falta pensar en lo global, para actuar en lo local, y viceversa, pensar en lo local, para actuar en lo global.
No podemos seguir atrapados en nuestras propias redes expresivas, hay que trascender más allá de nuestra insularidad, desde el poder de la lengua.
Esa máxima, le cae muy bien, al texto con el cual hemos estado en franca dialogía, necesita expandirse más allá de nuestros esquenas de "quinto patio", aunque hay que reconocer el valor estético de esta obra, por el humor y la ironía interna que proyecta, desde sus personajes.
Desde esta obra, se expone al público, la voz y el matiz popular de un narrador que anda poniendo ojo y oído en lo que ocurre en las esquinas de su caminar y los que otros cuentan, para él contarnos, a su modo, procurando brindarnos una sonrisa, desde sus ocurrencias ficcionales y muy reales.
No es un nombre más en la narrativa dominicana, el que tenemos, no, es un texto que significa la entrada de un narrador que va construyendo su horizonte, sobre este pedregoso panorama literario nacional, y eso nadie lo sospechaba, nadie lo sabía, "hasta que un día nos damos cuenta".
Así como vuelvo y recorro mis pasos, desde un custionamiento crítico a mis acciones, debo reconocer que estamos ante una narrativa no costumbrista, como quieren reducirla, es una narrativa tan cotidiana y e identitaria, como la de Leonardo Nín, aunque cada uno, desde su perspectiva vivencial.
Debo dejar en claro que, en su momento, abordaré o trabajaré la poética de Amilkar Herasme (1952), Abraham Méndez Vargas (1961) y Oscar Acosta Pérez (1962), como un punto pendiente, para bien de nuestra literatura nacional.
En otro orden, el quehacer literario del Sur de Neiba, provincia Bahoruco, asume un lineamiento machista, porque en este quehacer de la escritura, la mayoría son hombres y hay muy pocas mujeres, lo que indica que hace falta promover o incentivar la creación entre las ñiñas y las jóvenes en la provincia Bahoruco, desde la familia y desde las escuelas.
Entre las mujeres escritoras de Neiba, podemos resaltar el trabajo poético y narrativo de Dulce Maritza Peña (6/10/1969), autora del libro "Cuando las Musas son Breves" (Poesía, 2014 ) y de la obra titulada, "Con los misterios no se juega"(Cuentos, 2020 ).
También hay que resaltar el trabajo de Petra Saviñón Ferreras (Neiba, 1978), quien ha trazado un sostenido trabajo creativo desde la poesía, llegando a publicar en actualidad, los siguientes libros: “Entre Brumas” (Editoria Nacional, 2006). “Duelos” (Editoria Nacional, 2015). “Retazos” (Anticanon, 2019).
Estamos hablando entonces de una poeta que asume posiciones desde el verso, rebuscando la defensa del hacer libertario, sin retrancas y el sentido de lo femenino, no como contradicción de la masculinidad, sino como pauta de la unión entre los sujetos y sus vivencias.
La esperanza es también una temática propia de esta poeta, en su afán de asumir el reclamo de una sociedad más justa, democrática y solidaria.
En la poética de artista, un motivo de su vivir, apegada al amor abierto a la vida,al sentir… en la entrega del querer en lo espiritual y en lo pasional, a la vez, sin apegos terrenales. Esta es una poética de la entrega, desde la imagen o la metáfora del vivir.
Además, tenemos a Saddie Acosta Munerlyn (1978), autora del libro "Una flor del sol para Sol"(2022), de quien se esperan otras obras que reafirmen su expresión poética.
Al llegar a este corte circunstancial, en este trabajo, no puedo dejar de mencionar a Yairys Pérez Acosta y su libro de cuentos, " El amor de familia" (2022). Una narrativa situada en la perspectiva del apego y la resaltación del amor filial. La familia es asumida como eje del narrar de esta creadora. De ella también se esperan otras obras que nos permitan tener un criterio más definido de su voz narrativa, desde su manejo de la palabra y el contar hechos, en su discurso narrativo.
Con esos cuatro tonos femeninos, hago una pausa en el traginar del quehacer literario de Neiba y sus municipios, con la esperanza de que desde la familia y desde las escuelas, incentivos de manera constante, por el desarrollo de la literatura, la creatividad y el pensamiento crítico, no sólo en Neiba o en la región Sur, sino en todo el país.
III-Conclusión
-En la región Sur del país,en especial en Neiba y sus municipios, hace falta el fortalecimiento del potencial creativo de nuestros niños y niñas, desde la familia y desde la escuela.
-Hay que proyectar la otra voz poética y patriótica de Apolinar Perdomo.
-En todas nuestras regiones hay que recoger el quehacer estético o artístico de quienes, hombres y mujeres, están trabajando la producción cultural-literaria y/o estética.
-Después de la narrativa de Leonardo Nín, hay una producción literaria en Neiba, sostenida, representada más por hombres que por mujeres.
-Desde una mirada transcrítica, tenemos en la producción literaria de Leonardo Nín, el soporte literario encontrado en los trabajos literarios de un Ángel Hernández Acosta (Quinito) y Manuel Matos Moquete (Otro cimarrón neibero).
-Las ferias regionales del libro de Neiba, deben servir de espacio catalizador, para promover nuestra literatura y el desarrollo de las potencialidades creativas de nuestros niños y niñas, en todos los municipios de la provincia Bahoruco, sin esperar nada del Ministerio de Cultura o del Ministerio de Educación.
IV-Bibliografía básica consultada
-Acosta Cuevas, Ariel…Neiba- Temas Culturales e Históricos.Editora Amigo del Hogar. Santo Domingo, R.D. 2018.
-Castillo,Gerardo…Flor de Cactus-Antología Poética del Sur Dominicano.
Editora Nacional
Ministerio de Cultura
Santo Domingo, República Dominicana. 2015
Cuevas, Julio y Ferreras Cuevas , Alexander….Antología Literaria en honor a Neiba. Editora Búho. Santo Domingo, República Dominicana, 2009.
Mateo Vásquez, Eddy, Antología Literaria de Neiba. Editora Alfa y Omega. Santo Domingo, República Dominicana. 1995.
Pérez Ferreras, Juan Solano….Antología de Poetas y Escritores de la Provincia Bahoruco.
Editora Taller
-Primera Edición-
Santo Domingo, República Dominicana. 1997.