Que la ministra de Cultura, Sra. Milagros Germán, haya anunciado el proyecto “Diálogos Culturales 2023” con la finalidad de erigir “puentes de comunicación” para la realización de un “diagnóstico participativo” respecto al diseño de “políticas publicas oportunas”, bien podría constituir, a pesar de sus buenas intenciones, una alharaca de mero entretenimiento, habitualmente propia de un lenguaje o discurso gubernamental desvinculado del contexto social y comunitario.

En efecto, las actuales estructuras centralizadoras de nuestro ordenamiento político definen sus fuerzas, objetos e intereses identificándolos con el poder excluyente, sistema ampliamente propincuo a las élites metropolitanas de la nación, donde la capital de la república —léase el palacio nacional—, como hemos insistido en diferentes oportunidades, regentea o manipula las provincias, y los municipios cabeceras de provincia regentean o manipulan las demás municipalidades. ¿Por qué el municipio de Piedra Blanca no fue también convocado a dicho evento como representante de la provincia Monseñor Nouel, asimismo como lo fue el municipio cabecera de Bonao? ¿Resultado de la centralización y la hegemonía cultural vigente? ¿O acaso fue una farsa la citación que hiciera nuestro presidente de la República, Lic. Luis Rodolfo Abinader Corona, con relación a que los municipios deben, de acuerdo al ideario duartiano, constituir el cuarto poder del Estado?

De todas maneras, ¿hasta cuándo estaremos, ya-va-ya-viene, reseñando, en una maniobra demagógica y constante, las demandas culturales, económicas y sociales de nuestras comunidades? ¿Dónde pernoctan funcionarios y personalidades que a estas alturas no ha reclamado los recursos millonarios, producto de las operaciones mineras de la Falconbridge y la Barrick Gold, que el municipio cabecera de Bonao y las élites metropolitanas de la capital, personeros y propietarios de un Estado extractivista, le han estafado y dilapidado al periférico municipio de Piedra Blanca? Recursos que, de hecho, hubiesen servido para la construcción de la plaza de la cultura, donde hubiésemos podido impartir lecciones de dibujo, pintura, escultura, cerámica, música, historia del arte, teatro y cine, entre otros. Además, la edificación de una biblioteca pública con un sólido club de lectura. En ese sentido, ¿por qué la Sra. Milagros Germán no aboga, dentro del diagnóstico cultural, para que el presidente de la República, Lic. Luis Abinader, y la cúpula política empresarial del municipio cabecera, Bonao, entregue al municipio de Piedra Blanca el 25 por ciento, 13 millones 750 mil pesos, de los 55 millones que, según fuentes confiables, se encuentran, hoy, en manos del autocrático y contradictorio Consejo Provincial para el Desarrollo de Bonao?

Bien visto el punto, pensamos que la tarea fundamental, en cuanto a las “políticas públicas transparentes”, sería la autonomía administrativa de los fondos mineros que legalmente le pertenecen al municipio de Piedra Blanca. De este modo, podríamos, con la posible cooperación del Ministerio de Cultura, empezar a resquebrajar el régimen paternalista y asistencialista que entumece el entendimiento de ciudadanos y ciudadanas de nuestra Patria. Pero más aún: comenzaremos, igualmente, a relacionar, al margen de un apoyo ilusorio, el lenguaje o discurso oficial en el contexto social de los propios participantes comunitarios.

 

Luis Ernesto Mejía en Acento.com.do