“Fuiste una antorcha que encendió a muchas mujeres. Tu gran preocupación: que fuéramos nosotras mismas. Siempre alegre y reconociendo el potencial de las mujeres. Plural. Eras de todas, no podías parcelarte. Indómita y valiente. Tenías tu palabra firme y sabías que la libertad no se negocia. Hasta siempre Magaly Pineda. Permanecerás por siempre en el recuerdo!.
Nació el día en que se conmemora la poesía, el 21 de marzo en el año 1943 Magaly era una mujer única, encantadora, donde llegaba, energizaba el ambiente, no he conocido a una persona que trabaje más que ella, era incansable trabajadora, visionaria, fue una escuela de superación personal, era una líder que abría espacios para que las jóvenes conocieran otras culturas, toda su vida estuvo dedicada a la construcción de una sociedad más humana, más justa, más igualitaria.
Desde el Centro de Investigación para la Acción Femenina-CIPAF, fundado en 1980, se realizaron proyectos de investigación sobre las mujeres rurales, la participación política de las mujeres, la democracia participativa, se practicaba una verdadera comunidad de amistad, respeto y crecimiento personal y colectivo.
Siempre tuvo tiempo para ir a la cocina y comer de lo que preparaba Ivelisse, la conserje, quien era la primera a tomar en cuenta, en el viaje a donde fuera nacional e internacional.
Blasina, su secretaria, cercana, Magaly trataba de que todas nos sintiéramos bien y que los trabajos se realizaran, sin acoso ni persecuciones. Gestionaba recursos materiales y humanos en cualquier parte, eran tiempos difíciles, no obstante, ella encontraba la manera de lograr todas sus metas. Desde Holanda, Nicaragua venían contra partes a trabajar la educación popular y a conocer nuestras realidades.
A Magaly le gustaba leer desde niña, pues vivía frente a una librería llamada La Ronda, en la actual Avenida Duarte, allí inició con los muñequitos o paquitos que eran historietas, La pequeña Lulu, Lorenzo y Pepita, Archie. El dueño de la librería le dijo que podía leerlos todos; pero eso sí cuidando que quedaran como si no se hubiesen usado, pues la niña gastaba todos sus ahorros en la librería.
En el bachillerato comenzó a leer a Corín Tellado, «gracias a ella desarrolló el método de lectura rápida, porque el tema siempre era un hombre alto, con un hoyuelo en la mejilla. Lo erótico era de una sensualidad»… Ya más adulta » uno de los primeros libros que encontré fue una historia sobre la guerra civil española, Neruda, Vallejo, Miguel Hernández»
La vida de cualquier persona para participar en el espacio público está marcada por la lectura, los libros, que nos amplían la mirada y los puntos de vista.
Ah, otro descubrimiento que encontré al leer el libro ‘Extraordinarias y grandiosas, heroínas de la cotidianidad una recopilación de historias testimoniales sobre las vidas de mujeres adultas mayores’, de la autoría de Miriam Mejía Campos, Graciela de la Cruz Bourdier y Venecia Pineda Blanco, fue que Magaly Pineda quería ser monja y que hizo muchas penitencias; nos dejó tantas enseñanzas, la última fue que al estar enferma de cáncer consideraba todos los tratamientos que se le administraban y tenía que estar muy convencida y segura de su utilidad para aplicársela, porque su cuerpo era de ella, consideraba que somos muy sumisas en las relaciones médico-paciente.
Magaly Pineda era brillante, irreverente, decía lo que pensaba, muy alegre, simpática, infatigable, decidida a hacer lo que se tenía que hacer para superar las desigualdades sociales, la discriminación contra la mujer, a nivel nacional e internacional. Pionera del feminismo en el último cuarto del siglo XX.
Estudió Sociología en la Universidad de Puerto Rico y fue dirigente de la Federación Universitaria Pro Independencia. Derrocada el régimen de Trujillo, regresó a Republica Dominicana y se incorporó al Movimiento Revolucionario 14 de junio.
En 1980 creó el Centro de Investigación para la Acción Femenina (CIPAF), para contribuir al protagonismo de las mujeres en la democracia. Fundó redes feministas en la región impulsando reformas para las políticas de género. Conferencias, Encuentros, Talleres, celebraciones de cumpleaños, socialización de experiencias, dinámicas de todo tipo para crecer…
Fundadora del Foro Feminista, a su muerte en 2016, este se llamó Foro Feminista Magaly Pineda y en su homenaje, se creó la Tertulia Feminista Magaly Pineda, ambas a nivel nacional. Amada y extrañada. Mujer extraordinaria.
Magaly fue una gigante mujer dominicana que hizo del CIPAF una escuela, un taller de formación de conciencia cívica, una institución en la defensa del sagrado derecho a la vida, a la educación de todas las mujeres.
‘No la limites, ella es una mujer del siglo XXI’ decía un cartel del CIPAF en la década del 1980, Centro de Investigación para la Acción Femenina, podemos ser pilotos de aviación, llegar hasta las profundidades del mar… no limitarnos al espacio doméstico, hoy vemos a las mujeres debutando y realizando actividades en todos los campos posibles. Imperecedero el recuerdo de Magaly Pineda.
Contra la violencia otro cartel decía mas o menos así que tus manos solo se levanten para saludar y abrirlas para abrazar.
Magaly iba siempre a la delantera, con la irrupción de las redes sociales y la Internet a finales de la década del 90, enseguida se incorporó y quiso que las niñas saltaran la brecha digital, acompañada de su querida compañera de trabajo y amiga Amparo Arango, desarrollaron proyectos que obtuvieron premios, se hizo una cibernauta, en una ocasión me dijo por teléfono que su abuelo era descendiente del fundador de la ciudad de San Cristóbal, cerca de su partida de este ámbito terrenal en el 2016 nos envió una colección de la revista QUEHACERES del CIPAF para que la digitalizaran en el Archivo General de la Nación donde trabajaba en la dirección de la Hemeroteca de dicha institución, poco después falleció.
