Por alguna razón me resulta demasiado familiar lo que veo en Los ojos de Tammy Faye y no puedo evitar asociar su patetismo sobre la hipocresía del sueño americano a esas películas biográficas que se vienen dando en los últimos años sobre gente que es prisionera de las trampas de la ambición y de la codicia del capitalismo más salvaje. Su crónica sobre el lado perverso del televangelismo se mantiene superflua y es tan aburrida como una misa de domingo en la iglesia, a pesar de contar con una lúcida actuación de Jessica Chastain como la televangelista carismática.

El drama biográfico narra a lo largo de varias décadas el ascenso y caída de la popular telepredicadora estadounidense, Tammy Faye, desde los humildes comienzos que tiene montando espectáculos cristianos al lado de su esposo, Jim Bakker, hasta la etapa en que prácticamente instaura a base de predicación la cadena de televisión PTL, la red de cadenas religiosas más grande del mundo encargada de llevar el cristianismo a todos los hogares durante 24 horas y siete días de la semana a través de su programa principal.

La narración, a menudo construida con material de archivo en su parte visual (sacado del documental), me cuenta la existencia de Tammy en el tiempo en que se hace multimillonaria al lado de Jim con el dinero de los televidentes que llaman por teléfono para donar cuando la ven predicando los mismos versículos sobre la autoaceptación y la prosperidad en televisión en vivo. También la infelicidad del matrimonio que tiene con el marido celoso y discretamente homosexual al que solo le interesa el beneficio personal en nombre del Señor, el poder de la iglesia cristiana conservadora y terriblemente patriarcal que no tolera las cosas diferentes, la inmensa popularidad que pronto la termina enviando a ella y a su esposo al infierno de la vergüenza por el fraude más escandaloso.

Chastain, en la actuación por la que recientemente ganó el Oscar a mejor actriz, me parece bastante creíble cuando captura, con cierto histrionismo y maquillaje irreconocible, los gestos de esa diva glamurosa de pestañas postizas y vestuario camp que canta y promueve, al servicio del teleevangelismo, discursos motivacionales a todas las personas sin importar su condición. Pero ni siquiera su presencia, o la de un blando Andrew Garfield, puede aminorar la falta de impulso dramático que mantiene el biopic en una superficie que, dicho sea de paso, reduce su discurso al eclecticismo y la indulgencia que, en realidad, nunca interroga la redención de la mujer empoderada del televangelismo. El trato es muy convencional.

Ficha técnica

Título original: The Eyes of Tammy Faye
Año: 2021
Duración: 2 hr 06 min
País: Estados Unidos
Director: Michael Showalter
Guion: Abe Sylvia
Música: Theodore Shapiro
Fotografía: Mike Gioulakis
Reparto: Jessica Chastain, Andrew Garfield, Vincent D’Onofrio,
Calificación: 5/10