(*) “Si Jesucristo estuviera aquí, físicamente hablando, porque espiritualmente lo sentimos, fuera un compañero del movimiento feminista” 

 

Susana Dionicio Montás

Maestra, abogada, cristiana protestante, madre y activista social, Susana Dionicio Montás escribió el libro “Entre la ciencia y la fe” en el que reflexiona sobre la política, los derechos sociales y las iglesias dominicanas.

Entrevistada en Libertarias, el segmento sobre mujeres, feminismos, derechos y nuevas masculinidades de La República Radio, considera que es un error de muchas iglesias protestantes y de sus líderes proclamarse “conservadores”, porque el protestantismo nació para cuestionar tradiciones que oprimían a la gente, y Jesús luchó contra las costumbres injustas de su época.

Sin embargo, no le sorprende que el conservadurismo se haga más fuerte en un momento histórico en el que, a su juicio, algunas iglesias prestan más atención a las ideas del expresidente republicano de Estados Unidos, Donald Trump, que a las de Martín Lutero.

Libertarias. Susana Dionicio Montas empezó por explicar por qué escribió su libro y destacó que la ciencia  y la fe no son caminos opuestos.

Susana Dionicio Montás. No tiene que haber dicotomía entre la ciencia y la fe. Si la fe ocupa su lugar en el desarrollo de la comunidad, y la educación basada  en la ciencia permite que los niños y las niñas tengan acceso a comprender, investigar y crear cultura científica, la sociedad crece, avanza.

Cuando la religión se encarga de anular esa oportunidad, entonces no tenemos acceso a la evolución educativa, tecnológica, emocional…  Soy abogada y enfoco todo desde un punto de vista jurídico, por ejemplo, abordo cómo la religión en muchos casos afecta la oportunidad de que se creen leyes que favorezcan los derechos de las mujeres, que son para el bien de todos, de toda la sociedad.

Libertarias. Muchas veces se asume que las mujeres de fe deben ser sumisas, silenciosas, pero usted escribe, es activista, ha asumido posiciones de liderazgo, ¿cómo lidia con esa contradicción?

Susana Dionicio Montás. Desde temprana edad entendí, gracias a la educación cristiana, que las personas no tienen que aceptar todo literalmente. No necesitamos cambiar de religión y de fe para presentar nuestros trabajos ante la sociedad. Cuando era adolescente empecé a trabajar con educación ambiental y la mayoría eran de otras religiones o de ninguna religión, y me sentía cómoda.  Estudiaba mucho la Biblia y mis mentores me decían que sí, que estaba bien, que no necesariamente tiene que ser todo el trabajo dentro de la iglesia.

También estudié en la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) y recibía esa educación jurídica liberal, como la universidad acostumbraba a enseñar, y me llevaba a escudriñarlo todo, retener lo bueno y dejar lo malo, nunca me aferré al dogma y en este libro transmito esa enseñanza. No es necesario dejar de tener fe porque no estemos de acuerdo con la forma en que se practica la fe.

Por otra parte, mi iglesia (Evangélica Dominicana y Metodista en Estados Unidos), en la que me formé, no tiene una tradición extremista o conservadora, hemos aprendido a que tenemos que aplicar el texto al contexto. Sin embargo, algunas personas de esta nueva generación están, desde mi óptica, un poquito confundidas y sienten que debemos calificarnos de conservadores cuando somos protestantes o católicos, y en la Biblia no dice eso, todo lo contrario, Jesucristo nunca fue conservador porque él refutaba las normas que estaban en contra de las minorías.  

Estoy plenamente segura de que si Jesucristo estuviera aquí, físicamente hablando, porque espiritualmente lo sentimos, Él fuera un compañero del movimiento feminista.

Libertarias. ¿Qué le da la fe? ¿Por qué usted cree?

Susana Dionicio Montás. Sin fe uno no puede tener, entiendo yo, la convicción de que algo que buscas debes alcanzarlo para el beneficio de los demás.

Yo creo firmemente que los seres humanos necesitamos de la fe para crecer, para mantener esa llama viva, esa energía. Sin embargo, esa fe debe ir acompañada de la misericordia. La fe acompaña a la misericordia y nosotros no estamos practicando eso.

Libertarias. ¿Por qué?

Susana Dionicio Montás. Por las situaciones que estamos viviendo. Cuando las mujeres son oprimidas o violentadas, las élites religiosas entienden que deben presionar para que se oprima más. Como abogada y particularmente como cristiana, me pregunto por qué no enseñamos que la mujer tiene derecho a la defensa, a disfrutar de los principios jurídicos que (muchos) vienen de principios cristianos. En el caso de las causales, muchas iglesias sienten la necesidad, la urgencia de mirar solamente desde “lo moral”, no desde la misericordia.

Siento que hay confusión y esa confusión tiene que ver con lo mediático. Antes los cristianos dominicanos no se autodenominaban conservadores, pienso que después de esa ola de violencia verbal en Estados Unidos con Donal Trump, las comunidades cristianas de nuestro pequeño país se han sentido empujadas a escoger un bando.

Libertarias. ¿Qué las empuja a tomar un bando? ¿Cuál es la necesidad?

Susana Dionicio Montás. La influencia que hay entre lo político y lo religioso, pero no desde el punto de vista del creyente y la política, sino desde las élites que rigen las religiones, igual que en la época de Jesucristo, que él tenia que llamar a los fariseos y saduceos hipócritas. Jesús sobrepasaba los límites de la ley.

La ley decía “no puedes hablar con la mujer”, pero él se acerca a la mujer sirofenicia, y le dice (no literalmente) “sabes que me estás poniendo en problemas, porque no puedo hablar contigo, no debería” y ella le dice “sabes que hasta los perritos recogen las migajas…”. Y entonces, ¿qué hace Jesús?, le responde, le ayuda, le da apoyo. Ella lo interpela a él y él a ella. Es una relación de libertad, democrática, pero a veces no lo vemos así.

Libertarias. Hay grupos religiosos que han influido en los partidos mayoritarios con el fin de que no se permita la interrupción del embarazo para salvar la vida de las mujeres si corren peligro de muerte, su embarazo es producto de una violación o es incompatible con la vida, ¿piensa que la oposición a las tres causales es minoritaria o es mayoritaria en su iglesia?

Creo que los feligreses, en su mayoría, cuando las congregaciones tienen la oportunidad de hablar del tema, son receptivos a la necesidad, cuando como cristiana y abogada les explico que una mujer que tiene un feto muerto en su barriga y está en peligro de morir, tiene derecho a defenderse. Desde el punto de vista emocional, espiritual, hay que acompañar a la mujer si está en estado de necesidad.

Pero, se hace difícil hablar de esos temas en las iglesias, aunque no creas que no se está haciendo, se está haciendo un esfuerzo.

Libertarias. ¿Cómo se da el liderazgo de las mujeres en las iglesias protestantes?

Susana Dionicio Montás. En muchas iglesias protestantes podemos participar del liderazgo, fui presidenta de los jóvenes, tesorera, tenemos pastoras, etc. Hay una diferencia con las católicas, que no pueden ser sacerdotisas.

Libertarias. Bueno, en algunas iglesias protestantes hay un rango equivalente al de los obispos católicos que las mujeres no pueden ocupar, no sé en su iglesia…

Susana Dionicio Montás. Pueden, pero generalmente siempre ha habido hombres. Desde mi punto de vista, creo que estamos limitadas, si un hombre opina y la cúspide no comparte sus ideas, no se le sanciona de una forma agresiva. Pero, igual que en el resto de la sociedad, si una mujer dice algo que encuentran contraproducente, muchas veces se la “comen viva”.

Los hombres que tienen su masculinidad en Cristo nos respaldan…

Libertarias. ¿Qué significa tener una masculinidad en Cristo?

Susana Dionicio Montás. Cristo siempre estuvo al lado de la mujer, sus discípulas primeras fueron las mujeres.  Los grupos de poder representan la información del a forma que ellos quieren, Cristo nunca se sintió avergonzado de andar con las mujeres, nunca se sintió impedido de conversar con una extranjera.

El hombre que tiene seguridad de quien es, no tiene miedo de que la mujer, porque no sea una subalterna, le vaya a quitar su rol, todo lo contrario…

Libertarias. ¿Hay algo doctrinal o bíblico que limite la igualdad entre hombres y mujeres en la iglesia y la sociedad?

Susana Dionicio Montás. En realidad, la forma en la que se interpreta, ese patriarcalismo, que viene desde antes de Ccristo, desde la formación de las religiones, ese patriarcalismo no es en realidad fundamentado en el espíritu de la doctrina.

Cuando se debatía el divorcio las iglesias no estaban de acuerdo porque decían que Jesús no lo aprobaba. Pero  el que escudriña ve por qué Cristo no quería el divorcio en su época, solo el hombre daba carta de divorcio a la mujer y Cristo defendió el derecho a no ser abandonada, si ella no podía dar carta de divorcio, se trataba de proteger sus derechos, la gente no lo ve así por la forma en la que las religiones lo presentan.

Libertarias. ¿Qué deben hacer las iglesias ante el maltrato machista? Algunas mujeres buscan apoyo en su comunidad y les dicen que aguanten…

Susana Dionicio Montás. La misión de la iglesia es acompañar a los miembros. Debemos hacer un llamado a acompañar, eso fue lo que hizo Cristo y lo que la Biblia manda, no podemos poner como excusa la ley o la costumbre. Los teólogos que no se autocalifican como conservadores entienden que Jesús luchó contra las tradiciones (injustas).

Nosotros para combatir la violencia tenemos que romper barreras, eliminar escombros.

Un pastor con principios sólidos, con formación teológica, no le va a decir que se quede, no lo creo, lo que sucede es  que hay pastores que ellos mismos se nombran…

Libertarias. Hay una teología cada vez más individualista, se centra en la prosperidad individual y no en crear comunidades, ¿es que el protestantismo es así o solo son grupos más conservadores?

Susana Dionicio Montas. El protestantismo surge de esa visión de crear condiciones para que la sociedad avance, surge cuando Lutero logra desprenderse de ese gobierno jerárquico, religioso, que presenta las bulas papales y esas cosas, no le veía lógica porque no estaban en la Palabra.

No creemos que el problema está en la religión, en ninguna religión, sino en que solo se resalta lo que las cúspides marcan.

La Biblia dice claro en Isaías 58, cuál es el verdadero ayuno, el que escogí es que “partas tu pan con el hambriento”.  Isaías 58 es un himno revolucionario a la defensa de la dignidad humana. Cambia ayuno por religión y verás que dice la verdadera religión, que partas tu pan con el hambriento…

¿Todavía Lutero es una referencia?

Es importante cuando se habla de la historia de la iglesia, para entender. Pero creo que para mucha gente ahora las ideas de Donald Trump son más importante que estudiar a Lutero.