El sustantivo “yonyón”, referido a un hongo o seta comestible, se escribe con inicial minúscula y con tilde en la última sílaba, indica hoy Fundéu Guzmán Ariza.
No obstante, en los medios de comunicación se utiliza este término escrito de manera desaconsejada en frases como “Antropóloga japonesa investiga en RD los secretos del Yonyon”, “El yonyon, protagonista de la cultura gastronómica en la provincia Independencia” o “El Yonyón es un tipo de hongo que aparece en lugares húmedos”.
El “Diccionario del español dominicano” recoge el nombre “yoyón” con los sentidos de ‘variedad de hongo de color negro’ y ‘plato hecho a base de arroz y hongos o setas hervidos’.
Su pronunciación asentada es aguda, de acuerdo con la grafía que registran tanto esta obra como el “Diccionario de americanismos” y el “Tesoro lexicográfico del español de Puerto Rico”, de modo que lo apropiado es escribirlo con tilde: “yonyón”, y no “yonyon”; además, por tratarse de un nombre común no necesita mayúscula inicial.
Por lo tanto, en los ejemplos citados lo más adecuado habría sido escribir “Antropóloga japonesa investiga en la República Dominicana los secretos del yonyón”, “El yonyón, protagonista de la cultura gastronómica en la provincia Independencia” y “El yonyón es un tipo de hongo que aparece en lugares húmedos”.
En cuanto al plural, se recuerda que los sustantivos y adjetivos terminados en “-n” forman el plural con “-es” si no va precedida de otra consonante, tal como explica el “Diccionario panhispánico de dudas”: “Por su pequeño tamaño y la dificultad para distinguirlos de hongos venenosos, los yonyones representan un desafío tanto cultural como científico”.
Fundéu Guzmán Ariza (www.fundeu.do) es una iniciativa de la Fundación Guzmán Ariza Pro Academia Dominicana de la Lengua, institución sin fines de lucro entre cuyos objetivos se encuentra impulsar el buen uso del español en los medios de comunicación de la República Dominicana. Cuenta con la asesoría de la Academia Dominicana de la Lengua, el Instituto Guzmán Ariza de Lexicografía y la Fundéu RAE, así como con el patrocinio económico del bufete Guzmán Ariza.