Siempre he preferido las novelas cortas, encuentro en ellas un valor que muchas novelas extensas no poseen, generalmente las novelas extensas están cargadas de oraciones redundantes que con una buena observación se podrían resumir y decir con pocas palabras todo lo que en esa desarrollada descripción el autor expresa.

Existen muchas novelas cortas que podría tomar como ejemplo para demostrar que no hay que desarrollar tanto una creación para crear buena literatura, por ejemplo, la novela La muerte en Venecia de Thomas Mann, o, El ruletista de Mircea Cărtărescu, entre otras, son buenos ejemplos de lo que digo. Ahora bien, no quiero que comprendan que, en este resumido artículo, trato de desvalorizar las novelas largas, claro que no. Para que no se mal interprete lo que digo: me refiero a que se puede decir mucho, con poco; lo único que hay que saber, es como utilizar las palabras para lograr con ellas, no una simple narración, sino un ejemplo de belleza narrativa que se puede disfrutar como la mejor poesía.

El extraño caso del Dr. Jekyll y Mr. Hyde.

Hace unos años leí en formato electrónico la novela corta El extraño caso del DR. Jekyll y MR. Hyde y quedé fascinado, pero como siempre sucede con la literatura que leo en electrónico, finalmente termino buscando el libro en físico para una relectura, justamente esto fue lo que ocurrió con esta reconocida novela escocesa. El resultado durante el desarrollo de la lectura fue descubrir que había olvidado significativamente muchas cosas de la historia, quizás esto no sea nada extraño para una persona que lee tanto como yo, pero me sorprendía bastante al notar que desconocía o no comprendía casi la totalidad de la novela, cosa que es muy extraño en mí, porque siempre mantengo fresco los recuerdos de la literatura que me gusta, como sucedió en aquellos años que leí esta novela.

No le di larga a mi reflexión sobre el porqué no recordaba mucho de la novela y concluí que podía deberse al tiempo que había transcurrido de mi lectura inicial y también que no le había dado repaso como me gusta hacer con esos libros que considero de valor. Para seguir disfrutando la lectura sin ningún tipo de interrogante me olvidé de que la había leído y la disfruté como si lo hacía por primera vez.

Este artículo solo busca la recomendación de esta novela, no pretendo hacer un spoiler exagerado, solamente una breve explicación en busca de despertar la curiosidad en aquellas personas que aún no la han leído.

El extraño caso del Dr. Jekyll y Mr. Hyde es una novela corta de horror autoría del escritor escocés Robert L. Stevenson (1850-1894) publicada en el año 1886.  Desde su aparición ha sido muy aplaudida y ha tenido un éxito significativo en todo el mundo, en el cine también ha sido valorada con varias entregas cinematográficas.

La historia se desarrolla en Londres y nos narra la vida del abogado Gabriel John Utterson quien se ve obligado a investigar a un repugnante ser que figura como heredero de la fortuna de su mejor amigo. En medio de la investigación, el abogado por descubrir cuál es el parentesco que une a su amigo DR. Jekyll con el misterio sujeto MR. Hyde, se veré sumergido en un mar de preguntas y misterio que finalmente terminará adentrándolo en una confesión que le cambiará la vida.  La historia en ningún momento deja escapar al lector, en cada página nos obliga seguir descubriendo y tratando de llegar al meollo del asunto. Desvelar el enigma que une al DR. Jekyll y MR. Hyde es el núcleo de la historia y es lo que finalmente obliga al lector a concluir la narración.

Les invito a leer esta majestuosa novela, un ejemplo de que en pocas páginas se puede encontrar una obra maestra que es capaz de aguantar a los embates literarios del tiempo.