Un amontonamiento de libros en anaqueles no es una biblioteca. La biblioteca, las municipales que tienen según la Ley 176-07 que existir en cada municipio, y más de una en municipios súper poblados, así como las bibliotecas escolares y universitarias, que deben existir en cada escuela, colegio y liceo, así como en cada universidad, tienen que ser espacios vivos para el aprendizaje y el desarrollo intelectual.

Tener un espacio con libros y una persona a cargo no es tener una biblioteca. Eso, como mucho, llega a simulación.

Las bibliotecas son parte esencial del corazón del trabajo docente, pues una de las tareas claves del educador es enseñar a consultar, investigar, extraer información, contrastar, etc., la información obtenida de los libros para conversar sobre ella en el aula.

No es sustituir la investigación y la consulta con un parloteo, sino promoverla, enseñarla a realizar, inducirla, recomendarla, solicitarla.

Pero la biblioteca, como eje de formación, va más de ahí.

¿Cómo debería operar una biblioteca para merecer ese nombre?

Solo un programa de promoción de la lectura y el aprendizaje convierte a una biblioteca en tal

La biblioteca no es un almacén de libros, sino un espacio en que se promueven tanto la lectura como el aprendizaje.

Desde esa perspectiva, la mayoría de las que se autocalifican como bibliotecas en nuestro país no pasan de ser tristes simulaciones, pura farsa.

Para que una biblioteca sea digna de ese nombre, debe estimular, albergar y alimentar la curiosidad, el interés, la sed de saber, las inquietudes y las expectativas de sus distintas audiencias.

Porque en la biblioteca no solo hay ficción, arte y temas afines. También están la ciencia, los hobbies, la historia y todo que ha concitado y concita la atención humana.

Y para todos debe proveer recursos y medios.

Así que, en la biblioteca y a su alrededor, como eje formativo, conviene que operen:

Talleres

Grupos

Asociaciones y sociedades por temas afines

Programas

Eventos

Celebraciones

Exposiciones y exhibiciones

Intercambios de libros

Encuentros con grupos y talleres de otras bibliotecas

Concursos

Lecturas y recitales

Puestas en circulación

Muestras

Montajes

Murales de honor

Homenajes y reconocimientos

Actividades

Que mantenga el espacio vivo, frecuentado, activo, atractivo.

Grupos por interés o afinidad

Una biblioteca es el espacio natural de encuentro de distintos grupos por interés o afinidad, para compartir sobre sus temas de interés común.

  1. Talleres literarios
  2. Clubes de lectura
  3. Grupos especializados por tema: cine, gastronomía, historia, fotografía, ecología, etc.
  4. Clubes de estudio de temas profesionales: medicina, psicología, ingeniería, arquitectura, diseño, música, etc.

Como reza el slogan de la XXV Feria Internacional del Libro SD 2023: “Para todo siempre hay un libro”. También para todos.

Y los seres humanos, como seres gregarios, disfrutamos conectar con personas que tienen los mismos gustos e intereses que los nuestros.

Ese espacio debe estar provisto por la biblioteca, porque allí se conservan y facilitan los libros que alimentan el interés y la curiosidad de los que aman esos temas.

Una de las tareas de toda biblioteca es, entonces, crear actividades que atraigan por áreas de interés a las personas y animarlas a formar un club o sociedad para promover el estudio y aprendizaje de esa disciplina, proporcionando no solo los libros, sino también un espacio para reunión y actividades.

Realizar cursos y talleres

Otra área clave de una biblioteca es fomentar, programa y ejecutar un programa continuo de formación.

Hay áreas claves que tienen que ser parte de un programa continuo de las bibliotecas:

  1. Formación en lectura eficiente
  2. Cómo leer un libro
  3. Habilidades de aprendizaje
  4. Cómo redactar de forma eficaz
  5. Cómo escribir un ensayo
  6. Cómo pensar de forma eficaz
  7. Pensamiento creativo
  8. Cómo promover la lectura en el hogar
  9. Periodismo local

Otras áreas apelan a los intereses particulares de las personas y familias.

  1. Inteligencia emocional
  2. Habilidades interpersonales
  3. Como expresarse en público
  4. Oratoria
  5. Inteligencia financiera
  6. Nutrición sana
  7. Cómo mejorar nuestra salud
  8. Gastronomía y cocina
  9. Fotografía
  10. Cine y video
  11. Canto
  12. Artes plásticas

Actividades y eventos

José Rafael Sosa entrega una partida de varias decenas de libros de Origami a Alicia Baroni, directora de la Biblioteca Infantil y Juvenil República Dominicana.

Importante es que la biblioteca congregue a su público para eventos y celebraciones, desde las fechas patrias a las fechas de relevancia histórica, promoviendo charlas, coloquios, debates, mesas redondas, etc., sobre dichos acontecimientos.

Igual, hay fechas de interés mundial, desde el día internacional del libro al día internacional de la ecología.

También, hay temas puntuales que excitan el interés público y que dan un motivo para atraer a nuevas personas. Esos temas de interés pueden ser aprovechados para ampliar la vinculación de la comunidad con su biblioteca, a través de distintas actividades.

Es útil emplear los recursos locales: médicos, pediatras, abogados, etc., que puedan presentar exposiciones y participar en coloquios para arrojar luz sobre los temas de interés.

Igualmente, el espacio de intercambio y formación de la biblioteca debe servir para que sean invitados los regidores, diputados, senador y otras autoridades civiles para que conozcan y se relacionen con la comunidad.

También invitar a las autoridades policiales y militares para un contacto con la comunidad.

Y no menos importante, que sirvan de espacio para atraer a organismos como la DNCD, la Cruz Roja y otros para cursos y talleres sobre

  1. Las drogas y sus consecuencias: cómo prevenirla
  2. El alcoholismo y sus consecuencias
  3. Cómo aplicar los primeros auxilios
  4. La prevención en el hogar: evitar incendios, intoxicaciones, etc.
  5. El cuidado de los bebes
  6. Cómo asegurar la salud del bebé durante el embarazo
  7. Cómo estimular la inteligencia de tus niños

Y temas de igual valor social para la comunidad.

Un programa continuo de renovación y ampliación del alcance

Manuel Betances y Luis Reynaldo Pérez, mientras exponían la música del libro de Raúl Recio, Bachata Roja, a la exposición de su música en la sección Libros que suenan en el Centro Cultural Banreservas.

La biblioteca igualmente debe mantener un programa continuo de renovación de su portafolio bibliográfico, a través de donaciones, adquisiciones y solicitudes.

Actualizar de manera regular el bagaje bibliográfico es sumamente importante si queremos mantener la atención y el interés, ya que libros desactualizados o mayormente con información obsoletas no generan interés.

En ese sentido, con empresas y personalidades de su locación se pueden promover los apadrinamientos bibliográficos, para incorporar regularmente nuevo material actualizado.

Por igual, la biblioteca es inteligente desarrollar un programa de Afiliación y Membresía que carnetice a las personas interesadas para aplicar

un programa activo de préstamo de libros a sus afiliados y, por igual, desarrollar una presencia activa en las redes sociales donde informe nuevos libros, próximos talleres y actividades, comparta comentarios evaluativos de los lectores (dando el correspondiente crédito), difunda PDFs y otros materiales disponibles gratuitos y pueda también amplificar con presencia virtual las distintas actividades.

Toda biblioteca debe ser dirigida por una bibliotecaria

Biblioteca Pedro Mir, de la UASD.

La biblioteca no es un zafacón para personal al que no se sabe qué hacer con él y dónde destinarlo. No es para mandar maestras enfermas o pendientes de jubilación a vegetar allí, como es la práctica al uso.

Una biblioteca es un espacio sensible de aprendizaje y crecimiento y debe estar dirigida por una bibliotecaria formada y bajo un programa cuyos lineamientos generales estamos trazando en este artículo.

Los libros deben ser cuidados por alguien que los ame y se haya preparado para proteger su uso.

Hay muchas otras funciones para colocar a los profesores, no en aquellos espacios para los que no están calificados.

Y eso es válido no solo para el sector público, sino para todos los sectores e instituciones.

Las bibliotecas no solo son para las escuelas, colegios y universidades. ¿Y las instituciones? ¿Y las asociaciones? ¿Y las empresas?

Centro León.

Todas las instituciones, todas las empresas, todos los organismos públicos deben por igual tener bibliotecas especializadas para la educación continua y el crecimiento profesional, intelectual y humano de sus miembros.

Los colegios profesionales que existen ¿poseen bibliotecas para sus miembros? ¿Esas bibliotecas están vivas, actualizadas?

¿Y las empresas? ¿Tienen disponibles medios de enriquecimiento y actualización profesional para sus empleados? ¿O les envían implícitamente un mensaje de que aprender y formarse no es prioridad ni valorado?

Vivimos un tiempo singularmente disruptivo y donde todo conocimiento es provisional.

Nuevas tecnologías emergen.

Nuevos conocimientos y avances tornan obsoletas muchas nociones que antes teníamos.

Un gran porcentaje de nuestra información ya es inútil y, en muchos casos, incluso falsa, errónea.

El asunto es que seguiremos tomando decisiones diarias en base a esas informaciones a menos que sea actualizada, renovada y refrescada con información útil, al día y veraz.

Ahora bien, esas decisiones y las acciones consecuentes no impactan exclusivamente a quien las toma, sino que tienen un impacto en su entorno tanto directo como indirecto, y puede trascender.

Piensa en esto: una o dos personas desarrollaron una virosis a la que no le prestaron atención y luego esa virosis, el COVID-19, se expandió y desde China se regó en el mundo entero y lo paralizó.

Fueron decisiones, en base a información obsoleta, las que facilitaron que el virus terminara contaminando al mundo entero.

El costo en muertes, en pérdidas económicas, en atraso está lejos aún de haber sido calculado. Fue astronómico.

Y en cualquier lugar puede replicarse.

Las personas toman decisiones en base a la información de la que disponen. ¿Están nuestros técnicos, profesionales, funcionarios, personal al día para tomar mejores decisiones y evitar errores prevenibles?

¿Están actualizando la información de que disponen?

La biblioteca es, junto a las actividades conexas, el espacio para que los cerebros se enriquezcan y todo eso tiene un impacto, un retorno de la inversión, medible no solo en productividad, sino también en reducción de desperdicios y trabajo mal hecho.

Aquiles Julián. Presidente del Centro PEN RD Internacional