Título original: Fast & Furious X. Año: 2023. Género: Acción. País: USA. Dirección: Louis Leterrier. Guion: Justin Lin, Dan Mazeau. Personajes: Gary Scott Thompson. Elenco: Vin Diesel, Jason Momoa, Rita Moreno, Alan Ritchson, Michelle Rodríguez, Brie Larson. Duración: 2 horas 21 minutos
Honestamente no creo que la serie de “Rápidos y Furiosos” sea la mejor saga de acción del cine americano, aunque durante todos estos años de actividad, ha hecho todo el esfuerzo por conseguirlo.
Si distribuimos la calidad sostenida durante todo el devenir de los episodios, podemos notar que tiene una media de calificación moderada, ni buena, ni mala. Esto puede analizarse de que las intenciones de llevarla hasta nuevos niveles en cada evento es directamente proporcionar a la idea de la posibilidad de su fracaso en cada uno de ellos.
La verdad es que hay que considerar que es una de las sagas de acción más populares de las últimas dos décadas y ha puesto a su protagonista Vin Diesel, a través de su personaje de Dom Toretto, en un puesto aceptable dentro de los estereotipos de la acción.
No es casual que la evolución de su historia y de los personajes que, de simples corredores clandestinos de la ciudad de Los Ángeles hasta convertirse en agentes de misiones secretas, fuera la táctica para hacerla comparable con otros filmes que explotaron el filón de las intrigas internacionales y los peligros en escenarios globales.
Sé que todos fuimos testigos de las acrobacias imposibles que en cada uno de los capítulos fueron vertidos como ensayos de ridiculez arbitraria que daba la idea de que necesitaban superarse cada vez más. Si hoy se ha llegado a un décimo capítulo es muy pensable que ha tenido la suficiente aceptación para mantenerla a flote entre tantos productos del mismo género.
Dirigida por el francés Louis Leterrier, conocido por participar en cintas como “El Transportador” (2002) o “Los Ilusionistas” (2013), este viene con predeterminadas ideas que conllevan a saltar toda posibilidad de lógica con tal de que todo parezca un gran espectáculo como el mismo género se lo ha permitido.
Leterrier confisca todos los elementos para definir una historia que muestre su mejor perfil sin que esto defina el agotamiento de la saga, sólo desea atención por parte del público y que no analice los huecos insustanciales que ella posee.
Lo que sí es seguro es que Dom Toretto y su familia han sido capaces de sobrevivir a todo lo que los guionistas le han puesto por el frente, teniendo a Justin Lin y Dan Mazeau que han escrito esta nueva historia secuela, lo que es justo pensar que han revalorado varios de los elementos que definieron a las anteriores historias.
Esta vez se trae, como fantasma apocalíptico, al personaje de Jason Momoa como Dante Reyes, hijo del narcotraficante que los Toretto se encargaron de ajusticiar en el episodio “Rápido y furioso: 5in control” (2011).
Movido por la venganza Dante recalcula todas las posibilidades para hacer sufrir a la familia Toretto que ya tiene, en su hijo, un heredero de las circunstancias. De esta manera, se sirven todos los platos para hiperbolizar la acción y contra toda lógica física, llevarla hasta los extremos. Esto hace que este episodio, aunque trate de emular todas fórmulas aplicadas en las anteriores, se queda como un espectáculo risueño que, estratégicamente, se tendrá que esperar su próxima entrega para saber cómo termina este circo de piruetas y locura automovilística.