La Ley de Cine 108-10 ofrece incentivos para invertir en el cine, pero algunos directores apuestan por buscar financiamiento en otros países para desarrollar una faceta de su largometraje. Esta acción se conoce como coproducción, donde producciones como Pepe, de Nelson Carlo de los Santos; Seropositivo, de Danilo Reynoso y Evelyna Rodríguez, y Canta y no llores, de Félix Sabroso, se crearon a través de este mecanismo de financiamiento.
Sin embargo, en los últimos meses República Dominicana se está enfocando en aumentar su participación en los festivales internacionales, acaparando el mercado extranjero a través del estreno, competencia o venta del producto local.
Desde 2016 hasta 2022, 49 películas nacionales fueron galardonadas en festivales locales, internacionales y en premios dedicados a resaltar lo mejor del llamado séptimo arte.
La directora general de la Dirección General de Cine (DGCine), Marianna Vargas, indicó que los festivales son un encuentro de networking para los realizadores dominicanos y los internacionales. Es decir, una plataforma para la promoción y desarrollo de proyectos cinematográficos a nivel global.
“Nosotros promovemos una agenda de reuniones estratégicas con agentes de ventas, distribuidores y alianzas con festivales internacionales”, resaltó Vargas.
Berlinale, Cannes, San Sebastián, Miami Film, son solo algunos festivales que República Dominicana ha tenido presencia.
El embajador de Francia en República Dominicana, Eric Fournier, indicó que el festival de Cannes es un lugar propicio para encuentros de artistas, productores y realizadores para apoyar y proyectar las producciones dominicanas.
“Poco a poco estaremos viviendo un cambio, la creatividad poco a poco transformará la percepción de República Dominicana más allá que ser un país de turismo… y tendrá una visibilidad mucho más importante”, explicó el diplomático.
Para esta edición, José María Cabral, Pablo Lozano, Manuela Germán, Sterlyn Ramírez y Gabriela Ortega, serán partícipes del festival de clase A, representando a Quisqueya.
Mientras, el director José María Cabral expresó que la participación enriquece la cultura cinematográfica y se cierran acuerdos para futuros proyectos.
“En 2018, con El proyeccionista pude cerrar negocios, y espero que en esta ocasión también sea fructífero, es un gran momento para el cine dominicano ya que se están haciendo películas que están viajando por toda parte del mundo y están ganando terreno”, afirmó.
La titular de DGCine consideró que en los festivales se busca alianzas de coproducción y de distribución, que permitirán a mediano y largo plazo la proyección de audiovisuales en diferentes mercados.
La participación de República Dominicana en el Festival de Cannes, Francia, de acuerdo con los cineastas es uno de los eventos cinematográficos más importantes a nivel mundial, que demuestra el compromiso del país con la internacionalización de su industria cinematográfica y su deseo de establecer vínculos sólidos en el panorama cinematográfico global.
Este proceso crea una identidad cultural que penetra en los festivales internacionales y brinda la oportunidad de que el país interesado exporte contenido local.
“A nivel estatal uno tiene objetivos fijos mientras la industria va creciendo, pero nosotros como productores somos parte de un ecosistema que contempla todas esas etapas simultáneamente, o sea, desde que un director tiene una idea ya en la ruta de desarrollo contempla la participación en festivales”, reveló Lozano.
Más allá de ser una ventana de proyección de las producciones más actuales, los festivales se convierten en un lugar para concretar negocios, ya que las distribuidoras, casas productoras y cineastas buscan un espacio para mostrar, vender y comprar un contenido.
Pero, además, se realizan talleres donde los realizadores o personal creativo puede capacitarse para mejorar o afianzar una técnica. Tanto como Pablo Lozano y José María Cabral confirmaron que en los festivales no existe una frontera, sino que permite a República Dominicana ampliar sus horizontes de la mano de otras naciones.
Más allá que una taquilla
Durante 2023, la asistencia a las salas de cine se situó en 350,554 cinéfilos que disfrutaron la proyección de 34 largometrajes dominicanos, según la DGCine.
Ante esta situación, la titular del organismo cultural indicó que las producciones van más allá que permanecer en cartelera, sino expandir sus horizontes y recorrido, que es concebido desde la escritura del guión.
“Esta colaboración es parte de la estrategia de internacionalización del talento y de los proyectos dominicanos consciente que nuestras aspiraciones van más allá de nuestra media isla y de las audiencias que se encuentran en nuestro país, sino de captar ese público global dispuesto a ver nuestro producto”, sostuvo.
La titular de DGCine indicó que el propósito es promover al país como un destino ideal para la coproducción, y “que cuenta con una estructura sólida” para recibir producciones internacionales robustas.
De hecho, su pensamiento queda confirmado en los directores y productores que eligen a Quisqueya como su destino fílmico.