El 31 de enero de 2020, hace cinco años, el Reino Unido abandonó formalmente la Unión Europea. En términos de empleo, son muchos en denunciar desde entonces una falta de mano de obra en sectores como la construcción, la enfermería o la restauración.

 

Los británicos votaron al Brexit para reducir la inmigración y poder hacer ellos los trabajos que hacían los europeos. Cinco años después, se ha incrementado la inmigración y falta de mano de obra en los sectores donde estaban los europeos, como la construcción, la enfermería o la restauración.

Paulina Dombriz es directora de proyectos de una empresa de ingeniería y construcción y dice que ya no pueden elegir: “Te ves muchas veces contratando a gente que no tiene el talento que tú necesitas para el puesto pero que son los que están disponibles. Eso se traduce en incrementos salariales también porque los perfiles están muy demandados, para al final contratar a alguien que tampoco es el que hubieras contratado en otras circunstancias”, lamenta.

“Incrementos salariales”

Desde el Brexit se han marchado 200.000 trabajadores europeos. Angela Mengis es enfermera y cuenta que todo cambió de un día para otro: “Los europeos se fueron y claro, tuvieron que contratar a un montón de trabajadores que vinieron la mayoría de África. Y ahora la mayoría de mis compañeros son de Nigeria, de la India y de Filipinas”.

Pero donde más se ha notado es en la restauración. Chuse Valero, propietario del Bar Tozino dice que es muy difícil encontrar trabajadores: “Tienes que avalar y tienes que ofrecer un sueldo que no sabes si se lo puedes asegurar y me parece que es para dos años. Tampoco sabes si le puedes ofrecer trabajo a una persona para dos años”, denuncia.