El portavoz del Ejército israelí, Avichay Adraee, dijo este domingo que quien crea que Hezbollah ataca Tel Aviv como Israel ataca Beirut que se diera un paseo por los suburbios beirutíes. Y todo el mundo en Líbano entendió que aquella frase iría seguida de más misiles.

Los residentes de la ciudad se despertaron este lunes, en un día más ante el sonido de las bombas. Antoine, residente de unos 60 años de edad, apuesta por la resignación.

“Para nosotros es algo… no es normal, pero estamos acostumbrados. Porque desde 1975 en este país, cada algunos años hay una guerra. Entonces estamos acostumbrados”

Antoine reside en un barrio que todavía no ha sido bombardeado, pero oye perfectamente los misiles desde su casa. Él cree que la situación es hoy más difícil que durante la guerra civil.

“No es fácil. Porque ahora no es como en la guerra de 1975. Durante la guerra había dinero, había negocio. Pero ahora es más grave. Hay regiones desconectadas del resto del territorio. Como el sur de Líbano o la Bekaa. La situación va de peor en peor’’.

Que Israel haya convertido buena parte del país en zona militar bajo riesgo permanente de bombardeos desplaza la población civil en cantidades masivas. Un vecino de la calle de Mar Mikhael que no quiere hablar ante los micrófonos afirma que más de 30 familias han llegado a la zona desde barrios bombardeados.

Mientras tanto, las noticias alrededor de un alto el fuego siguen sin llegar. Josep Borrell, jefe de la diplomacia europea, admitió este domingo desde Beirut que detecta falta de interés en la tregua por parte del lado israelí.