La policía brasileña detuvo este martes a cuatro militares desplegados en la cumbre del G20 en Río de Janeiro por un supuesto plan para matar en 2022 al entonces presidente electo Luiz Inácio Lula da Silva.
Con Joan Royo Gual, corresponsal de RFI en Rio de Janeiro
Cuatro militares de un grupo de élite y un policía fueron arrestados la mañana de este martes, acusados de haber planeado asesinar al presidente Lula da Silva en 2022.
El objetivo era asesinar a Lula y a su vicepresidente justo después de las elecciones en las que derrotaron a Bolsonaro, para impedir que llegaran al poder. También planeaban asesinar al juez del Tribunal Supremo Alexandre de Moraes, que en los últimos tiempos se convirtió en el enemigo número uno de la extrema derecha brasileña.
Las detenciones han causado una fuerte conmoción en Brasil por la gravedad de los hechos en sí y porque tres de los militares arrestados estaban en activo y ahora mismo formando parte del esquema de seguridad de la cumbre del G20 que se está celebrando en Río de Janeiro.
Las primeras informaciones conocidas apuntan que el grupo pretendía orquestar un golpe de Estado y que pensaron en la opción de envenenar a Lula.
Además, parte de estos planes se debatieron en casa del número dos de Bolsonaro, el exministro Walter Braga Netto, lo que complica aún más la posición del expresidente, que ya acumulaba indicios de participación en la intentona golpista que sus seguidores protagonizaron en Brasilia en enero de 2023.
Los sospechosos podrían enfrentar los cargos de abolición violenta del Estado de derecho, golpe de estado y organización criminal.
La operación tiene lugar casi una semana después de un ataque fallido contra el Supremo Tribunal Federal (STF) en Brasilia.
Un hombre murió frente al edificio, luego de arrojar explosivos artesanales que no provocaron otras víctimas.
El supremo se halla en la Plaza de los Tres Poderes de la capital brasileña, donde también se encuentran el palacio presidencial de Planalto y el Congreso.
La policía investiga posibles "conexiones" del atacante con los eventos del 8 de enero de 2023. El hombre había estado en aquella fecha en Brasilia y se indaga si participó en la asonada.