En ocho días, el número de focos de fiebre catarral ovina se ha multiplicado por cuatro en Francia. En otros países europeos se registra un aumento considerable de esta enfermedad viral.
La fiebre catarral ovina (FCO) es una enfermedad viral transmitida por mosquitos que afecta al ganado ovino, caprino, bovino y cérvidos. No afecta a los seres humanos, pero puede causar daños considerables a las poblaciones ganaderas. Se trata de una enfermedad transfronteriza, por lo que las medidas nacionales son insuficientes para controlar su propagación.
“Estamos haciendo frente a una explosión de casos, pero en las inmediaciones de los primeros focos” detalló el Ministerio de Agricultura francés.
Diez departamentos del norte de Francia ha sido afectados, para un total de 190 focos identificados.
La fiebre catarral ovina, también llamada “virus de la lengua azul” se manifiesta con fiebre, problemas respiratorios, lengua colgante, pérdida del apetito y a veces con la muerte del animal. Actualmente se conocen 26 serotipos conocidos del virus, con diferentes tasas de virulencia o mortalidad.
En Francia, los primeros focos de FCO fueron identificados el 12 de agosto. El gobierno activó un plan de medidas para frenar el avance de este virus, que abarca a 30 departamentos.
Otros países europeos reportan casos de FCO, principalmente en Alemania, Bélgica y Países Bajos.
Con AFP