La candidata presidencial del Frente Amplio, profesora María Teresa Cabrera, criticó que el presidente Luis Abinader, al rendir cuentas, no mostrara el impacto que ha tenido en el desarrollo humano la política económica del gobierno.
Cabrera expresó que reconoce luces la gestión del actual gobierno, pero que no se sabe cómo avanza el país en materia de desarrollo humano.
Aseguró que este es el gran déficit de la presentación de rendición de cuentas del presidente, llevada a cabo este martes 27 de febrero.
Consideró que no se mostraron indicadores que relacionen el crecimiento de la economía, y su impacto en el bienestar social.
“Toda comparación con el gobierno anterior dará ventajas al presente gobierno, en tanto amplios sectores de la sociedad califican aquel como una pesadilla”.
Precisó que es compresible que los organismos internacionales gestores de los intereses del gran capital financiero internacional (BM, FMI, Davos) lleven al presidente a concluir que “somos ejemplo de éxito”, pero señaló que esas “excelentes cifras macroeconómicas” se exhiben en el país desde hace décadas.
"Al mismo tiempo continúa la reproducción de la pobreza y la desigualdad, porque esos organismos son artífices y guardianes del modelo económico impuesto al país: Zona franca, turismo y remesas que no garantizan desarrollo integral", precisó María Teresa Cabrera.
También criticó que el discurso no hiciera referencia a la injusta estructura tributaria existente en el país, en virtud de la cual los más ricos pagan muy pocos impuestos, mientras los más pobres los pagan por todos los ingresos que reciben, que son poquísimos.
"Esta situación es peor si se consideran las exoneraciones por parte del Estado, que se calculan en más de 400 mil millones, sin la evasión”, aseveró la candidata presidencial del Frente Amplio.
La candidata presidencial dijo que la reducción de la pobreza evocada por el presidente, especialmente en el campo y en las mujeres, sugiere el predominio de empleos llamados “chatarras” especialmente en las zonas francas, sin libertad sindical y con salarios deprimentes.
Reconoció los aumentos de salarios realizados, pero cuestionó que persista el carácter restrictivo de la política salarial y el efecto neutralizador de la inflación.
“El discurso del presidente no dio cuenta de cómo avanza el país en materia de desarrollo humano; a pesar de que las estadísticas presentadas por el presidente son ciertamente superiores a las de gobiernos anteriores. Es que al igual que en las pasadas gestiones, todo se queda en estadísticas frías que nada dicen de cómo se mueve el bienestar general del pueblo. Se han construido hospitales, lo cual está muy bien; pero es preciso saber cómo esto ha mejorado el servicio efectivo de salud, y su impacto en la salud del pueblo”, subrayó María Teresa Cabrera.
Destacó como positivo que la inversión pública ha llegado a áreas y lugares diversos, en la región sur y el noroeste, por ejemplo, porque supera la política de sólo preocuparse por dos o tres lugares donde haya posibilidades de mayor rentabilidad del capital.
Enfatizó que el paquete de bonos de subsidio a los pobres expresa el componente asistencialista del modelo, y que el asistencialismo no conduce al desarrollo, sino que reproduce pobreza y población cautiva de un Estado clientelar. “Igual que los gobiernos anteriores”, concluyó la candidata presidencial del Frente Amplio.