En el contexto político-electoral de la República Dominicana, y en perspectiva a los comicios del 2024, la coopetencia de oposición articulada en la Alianza Rescate RD, se traduce en eficaces acciones prácticas de cooperar y competir entre los mayoritarios partidos de la Liberación Dominicana, Revolucionario Dominicano y Fuerza del Pueblo. que buscan ampliar su influencia en el mercado electoral.
Superados naturales escoyos y desafíos, conscientes de que valía la pena afrontarlos, el anuncio que completa la inédita Alianza Rescate RD, impone el arribo de un nuevo escenario electoral, en el que la integración opositora se presenta cortejada de una acertada y eficaz estrategia electoral con amplias potencialidades para desalojar del gobierno al Partido Revolucionario Moderno, previa victoria electoral en las elecciones municipales de febrero del 2024.
La coopetencia es un concepto que se traduce en acciones prácticas de cooperar y competir para ampliar la influencia en el mercado electoral. En el caso de una alianza entre partidos de oposición, como el caso que nos ocupa, la cooperación se da en torno a un objetivo común que busca derrotar al partido de gobierno, en este caso al PRM. Sin embargo, la competencia también está presente en el PLD, PRD y FP, ya que cada una de esas formaciones políticas buscan ganar a su favor la mayor parte del electorado.
En términos conceptuales la palabra "coopetencia" es un neologismo que combina las palabras "cooperación" y "competencia". Se refiere a una situación en la que dos o más empresas, generalmente de igual naturaleza, en relación a la mercadería o servicio que ofertan en el mercado, pero también se articula en organizaciones políticas, de similares o diferentes ideologías, que cooperan en algún nivel de elección, o áreas geográficas, pero compiten en otras en otros, pero en ambos casos el objetivo estratégico es ampliar su influencia en el mercado electoral.
Importante es recordar que, en la República Dominicana, y en muchas partes del mundo, huelga hacer historia sobre las alianzas más inverisímiles que se han producido para actuar en los escenarios empresarial, político, electoral y militar (incluso, unas veces implícito y otras veces explicito), cuando las circunstancias coyunturales, y las conveniencias, imponen asumir una táctica que le permita a los contrayentes derrotar al adversario común, que es el objetivo máximo que les hace actuar en connivencia.
“En un giro singular de la historia, en el 2010 me eligieron los votos de la derecha y en el 2014 me eligieron los votos de la izquierda, sumados con los del centro”, palabras del ex presidente de Colombia Juan Manuel Santos, en la celebración de la relección para un segundo mandato presidencial, un pie de foto con su familia, recogido en su libro-memoria ”La batalla por la paz”, con el subtítulo “el largo camino para acabar el conflicto con la guerrilla más antigua del mundo”.
Desafío cambia historia RD
La cooperación entre los mayoritarios partidos de la Liberación Dominicana, Revolucionario Dominicano y Fuerza del Pueblo es un desafío histórico, pero es un desafío que en el corto plazo las dirigencias de las tres formaciones se habrán dado cuanta que ha valido la pena afrontar…
Y que su desprendimiento podría traer como resultado haber cambiado el curso de la historia de la República Dominicana, al colocarse unidos como un bloque con amplias perspectivas de poder, lo que se traduce en una especie de señuelo para el mercado electoral, en el que se incluyen las bases de esos partidos que fueron quienes impusieron esa integración, y que las direcciones políticas lo que hicieron fue interpretar y hacer realidad es demanda.
Semana atrás le presente a la inteligencia artificial la coyuntura electoral de la República Dominicana, y esta fue su respuesta que reproduzco sin ponerle ni quitarle ni un punto ni una coma:
“En la coyuntura política actual de la República Dominicana, los tres partidos de oposición, el Partido de la Liberación Dominicana (PLD), Revolucionario Dominicano y la Fuerza del Pueblo (FP), se enfrentan a un dilema similar al del prisionero. Si se unen, pueden derrotar al Partido Revolucionario Moderno (PRM).
“Sin embargo, si no se unen, existe el riesgo de que el PRM gane ambas elecciones, las municipales de febrero y la presidencial y congresional de mayo…para superar este dilema, las tres formaciones de oposición deben cooperar. Esto significa que deben acordar un plan común para las elecciones, incluyendo un candidato presidencial único. También deben estar dispuestas a hacer concesiones, tanto en términos de políticas como de liderazgo.