El turismo de cruceros por las islas del Caribe es el líder a nivel mundial ya que durante el año 2022 se movilizaron por esta vía cerca de 20 millones de cruceristas, lo que representa un 34% de todos los que utilizaron en el mundo este medio para sus vacaciones. El mediterráneo con un 17% de afluencia ocupó el segundo lugar, de acuerdo con la Asociación Internacional de Líneas de Cruceros (CLIA, por sus siglas en inglés)
Hay que señalar que la República Dominicana es el líder del caribe en la afluencia turística y está en los primeros lugares de toda América Latina. Por otro lado, la afluencia de turistas por la vía marítima, es decir los que se transportan en los grandes cruceros durante gran parte del año, pero mayormente en los meses de invierno y que hacen sus recorridos por el caribe ha tenido una considerable mejoría en los últimos años. Aun así, somos de opinión que partiendo de todas las bondades que podemos mostrar a los visitantes podríamos todavía incrementar este turismo, como lo han hecho otros destinos en la región.
El caso de Cozumel es importante destacar, ya que en los últimos años ha duplicado los turistas que llegan a esta isla la más grande de México, que no muchos años atrás no existía en el mapa de las grandes compañías de cruceros como destino importante y hoy puede mostrar que se ha convertido en el destino que recibe la mayor cantidad de turistas por esta vía en el mundo. Después de recibir los embastes de la crisis de la COVID 19, hoy se ha recuperado totalmente y se espera recibirá durante el presente año 4.3 millones de cruceristas.
También habría que hablar de las islas Bahamas, con una larga tradición en el turismo de crucero, ya que ha sabido aprovechar su gran cercanía a Miami, de donde salen la mayor cantidad de cruceros que se desplazan por todo el caribe y son americanos quienes representan más del 50% de los cruceristas que toman sus vacaciones en estas islas. Las Bahamas están situadas a tan solo dos horas de navegación de los puertos de Miami y para este año 2023 esperan terminar con la llegada de más de 8.0 millones de cruceristas.
La competencia para la República Dominicana, en el mercado de los cruceros, es bastante considerable, ya que se enfrenta a un gran número de islas en el caribe que nos llevan años en la explotación de este turismo que, aunque no aporta en términos de gastos por viajero igual que el turista que se hospeda en los grandes resorts del país, añade cifras razonables a la economía nacional y arrastra potenciales visitantes que procuran volver con mayor estadía.
Revisando rápidamente las cifras de los últimos años correspondientes al comportamiento de del movimiento de cruceristas por el país se tiene lo siguiente:
Es notable el gran desempeño de Puerto Plata, en sus dos puertos, con un crecimiento anual acumulativo de 16.08% y en términos absoluto de 373,238 cruceristas, representando en el 2022 el 77.4% del total recibidos por el país. Esto tiene aún más valor si se toma en cuenta lo que ocurrió en los años 20 y 21 con la COVID. Indudablemente que se ha realizado un gran mercadeo de ambos puertos en la novia del Atlántico.
Contrariamente a lo sucedido en Puerto Plata, el desempeño en los demás puertos de la República Dominicana no ha sido bueno, ya que tanto en Santo Domingo, La Romana, Samaná y Punta Cana lo que se ha producido es un decrecimiento, es decir entre todos se recibieron 430,748 cruceristas en el 2019 y tan solo 298,871 en el 2022. Habría que realizar una evaluación de las razones de este comportamiento, sobre todo en los puertos de Santo Domingo que han experimentado los mayores descensos.
Quizás las razones de estos comportamientos negativos tienen su explicación en el hecho de que, en el análisis del perfil de los cruceristas los que componen la mayoría buscan en sus travesías sol y playas, deportes acuáticos y tours culturales encuentren que en Santo Domingo resultan menos atractivos y más distantes que en el norte y el este del país.