Las personas con Trastornos de Personalidad Histriónicos (TPH) “buscan ser el centro de atención de los demás y, al mismo tiempo, tienen cambios conductuales y psicoemocionales bruscos en sus relaciones personales” (DMS-I y II).
En tal sentido, la carga genética influye en el desarrollo del TPH, lo que es reforzado por los abusos y los traumas psicoemocionales que vivieron las personas histriónicas durante su niñez, infancia y juventud (DMS-II y III).
No obstante, las personas con TPH son exageradamente dramáticas y sensibles a las críticas o desaprobación por parte de los demás y, al mismo tiempo, culpan a otros de sus fracasos y/o decepciones. Además, las con TPH disfrutan tener el control de sus pares, así como de aquellas cosas que les dan seguridad psicológica y emocionalmente (Sociedad de Psiquiatría de Reino Unido, 2019).
Como se sabe, las personas con TPH tienen rasgos marcados de negatividad e insatisfacción personal, son inestables emocionalmente y se alteran por cosas sencillas, son impulsivas y se deprimen con frecuencia. Además, son personas malhumoradas sin justificación y reaccionan bruscamente antes la más mínima insinuación y/o provocación (DMS- IV y V).
Otro rasgo distintivo de las TPH es que, usan su apariencia física como chantaje y actúan de forma provocativa y seductora para llamar la atención, por un lado; mientras que, por el otro lado, asumen posturas sumisas para retener la atención de los demás, según sus intereses personales (DMS-III).
En tal sentido, los especialistas en higiene y salud mental sabemos que, las personas histriónicas tienen tendencias a avanzar hacia una neurosis o psicosis temporal peligrosa, llegando a autovalorarse al extremo y, a ignorar las necesidades reales de quienes les rodean (Sociedad de Psiquiatría de los USA).
Por otra parte, las personas histriónicas tienden a padecer del Trastorno Esquizotípico de la Personalidad (TEP). El TEP es una discapacidad psicoemocional que altera los patrones de pensamientos y de comportamientos alternos, como si se tratara de un cuadro de Bipolaridad (DMS-II y V).
En tal sentido, las personas que padecen TEP se quejan mucho y se victimizan para llamar la atención y, en algunos casos extremos, son agresivas y vierten amenazas de suicidio como mecanismo de chantaje (DMS-V).
Como se puede apreciar, las personas con Trastornos de Personalidad Histriónicos (TPH) desarrollan relaciones complejas y patológicas con sus pares, a quienes logran usar, chantajear y amenazar como mecanismo de control. El supuesto control que ejercen las personas con TPH “les da tranquilidad psicoemocional, estatus y seguridad personal” (DMS IV y V).
Según los estudios realizados con más de 600 mil personas a nivel mundial, en el periodo 1986-2017 se constató que, las personas con TPH prefieren relacionarse con individuos (hembras y varones) con alto prestigio social, poder económico y capacidad intelectual. En tal sentido, las personas con TPH prefieren establecer relaciones de noviazgos y/o de parejas con hombres y/o mujeres que les ofrezcan o les den prestigio y seguridad (ESTUDIOS DE LA. OMS, ONU y OPS, 1986-2017).
No obstante, los especialistas en higiene y salud mental sabemos que, las personas con PTH ejercen algunos castigos sobre sus relacionados, unos muy explícitos y, otros que podrían confundirlos o incomodarlos. Como tal, las personas con THP son actores o actrices de primera, pues saben cómo comportarse según los escenarios y los actores con los que éstos/as están actuando (DMS-IV y V).
Como tal, el TPH aparece con mucha frecuencia en los líderes y lideresas que conducen grupos sociales y comunitarios, partidos y movimientos políticos y las instituciones públicas y descentralizadas. Estos supuestos líderes y lideresas, se caracterizan por expresar soberbias sin necesidad y actuar con arrogancia y prepotencia para humillar y controlar a sus pares. Son, además, personas atropellantes y se sienten cómodas con aquellas personas serviles y sumisas (Sociedad de Psiquiatría del Canadá, 2018).
Como se sabe, los partidos y movimientos políticos, las organizaciones sociales y comunitarias, las instituciones públicas y los grupos populares no han avanzado en nuestro país debido a las patologías histriónicas de las que son portadores y portadoras la mayoría de nuestros líderes y lideresas tradicionales (Discusiones e Informes del CODOSIP, 2013 y 2019).
En tal sentido, si nos detenemos a observar cómo actúan nuestros líderes y lideresas tradicionales en tareas y/o acciones políticas, institucionales, sociales, comunitarias, empresariales y comerciales, podemos constatar sin ser sociólogos, antropólogos, psicólogos o psiquiatras, quién o quiénes de estos/as líderes o lideresas son portadores/as de Trastornos de Personalidad Histriónicos (TPH) con un cien por ciento de certeza.
Yo, como un actor más en este Gran Teatro llamado Sociedad, estoy atrapado mentalmente por el cuerpo de una mujer histriónica hermosísima, actuando la mayoría de las veces, como un imbécil o idiota. Y usted, cómo se calificaría?
“La personalidad es un cúmulo ininterrumpido de gestos exitosos”. F. Scott Fitzgerald