Durante el 2023 el patrimonio de los afiliados registró un formidable aumento de RD$117,314 millones de pesos. Lamentablemente, esta información ha pasado por alto para muchos dominicanos inmersos en la inmediatez cotidiana, mientras otros todavía no han valorado su trascendencia e implicaciones sociales.
Según la SIPEN y ADAFP, de ese aumento RD$74,774 millones, el 63%, es el resultado de la rentabilidad de las inversiones durante el año. Y solo los restantes 42,540 millones, el 37%, corresponden a las aportaciones de los trabajadores y de sus empleadores.
Simplificando estos resultados, ello quiere decir que, por cada peso depositado en las cuentas de los afiliados, se agregaron 1.75 pesos por ganancias. Una proporción “nada mal” y muy prometedora ya que, sin lugar a duda, continuará ensanchándose durante este y los próximos años.
Ese es un ejemplo tangible de las grandes ventajas del sistema de capitalización individual ya que, al no tocar los ahorros de los afiliados puede invertirlos y capitalizarlos en forma progresiva y recurrente, a fin de maximizar la acumulación del fondo de pensión, sin incurrir en déficits ni necesitar subsidios estatales.
El monto del patrimonio de los trabajadores ascendió a RD$962,288.3 millones por lo que al ritmo que lleva entre julio y agosto superará el MILLÓN DE MILLONES de pesos, un monto cercano al 20% del producto interno bruto (PIB) y al 70% del presupuesto nacional.
Si estos resultados son muy positivos para los trabajadores con un aporte de solo el 8.4% del salario para el retiro, imagínense el lector cuánto sería el crecimiento y la acumulación del patrimonio de los trabajadores dominicanos, si se elevara gradualmente al 13.5%, como propone nuestra Fundación.
Pero, a pesar del crecimiento del patrimonio las pensiones serán insuficientes
Solo para contextualizar y relativizar estos resultados, si dividimos el fondo acumulado entre los cotizantes activos obtendremos un promedio de RD$510,768,74, un monto que apenas cubriría unos 22.2 meses, menos de dos años, de una pensión del 70% del salario promedio.
Pero estimando solo una pequeña proporción de los restantes 2.6 millones de afiliados que NO cotizan, obtenemos menos de 18 meses, año y medio de pensión. Si en los 10 años que faltan para completar los 30, el fondo creciera para cubrir 5 o 6 años de pensión, ¿cómo y quienes van a financiar unos 10 años más de pensión promedio? ¿Tenemos una idea de su impacto político, social y fiscal?
Estos cálculos groseros confirman los oscuros pronósticos de los estudios que arrojan una tasa de reemplazo de alrededor del 25% del salario. El 75% de los afiliados recibirá una pensión insuficiente, ya que solo podrán cotizar entre 15 y 25 años debido a las fluctuaciones del mercado laboral.
Por tales razones, la Fundación Seguridad Social para todos (FSSPT) insiste en la necesidad de una reforma previsional que, por lo menos, duplique el nivel de las pensiones que recibirán los afiliados, elevando el aporte del 9.97% actual al 15.0% total, mediante un aumento gradual en seis años.
De acuerdo con la propuesta, a partir del 2025 el aporte de los trabajadores subiría un 0.24% (la cuarta parte de un 1.0%) cada año hasta el 2030. Y el de los empleadores un 0.60% anual durante el mismo período. Como señaló Mayelín Acosta Guzmán, en el periódico HOY, el principal desafío es aumentar el aporte, uno de las más bajos de la región.
La propuesta eleva el Fondo de Solidaridad Social (FSS) del 0.4% actual al 3.5% para garantizar una pensión suficiente de acuerdo con el esfuerzo realizado. Este cambio triplicaría el nivel actual de las pensiones a favor del 75% de los afiliados, de bajos salarios y con cotizaciones insuficientes.
A pesar de que el rápido crecimiento del patrimonio de los trabajadores superará este año el MILLÓN DE MILLONES de pesos, el mismo no garantiza pensiones dignas y sostenibles, por lo que urge una reforma para elevar gradualmente las cotizaciones para asegurar pensiones dignas y sostenibles para todos.