¿Quién no ha escuchado hablar de los cambios de humor o alteraciones emocionales que atraviesan ciertas mujeres durante su ciclo menstrual? ¿Quién no ha tenido una madre, hermana, hija o pareja, que en ciertos periodos del mes están más irritables o sensibles?

Aunque no soy experto, ni profesional en esta área, he tenido que interactuar con las mujeres de mi familia y mi entorno. Ese ha sido un medio de aprendizaje maravilloso y por eso las mujeres son -quizás- los seres más adorables del planeta, seres donde la química, la endocrinología, la psicología y la medicina  se manifiestan empíricamente, una especie de laboratorio viviente y hermoso.

Si bien este fenómeno se conoce comúnmente como síndrome premenstrual (SPM), es crucial entender la verdadera razón detrás de los conflictos de pareja y, más importante aún, buscar estrategias para evitar que las hormonas secuestren nuestras relaciones.

El SPM y el trastorno disfórico premenstrual (TDPM) son condiciones reales que experimentan muchas mujeres en relación a sus ciclos menstruales. Como indicamos anteriormente, sus efectos son conocidos y discutidos, y aunque han habido casos donde dichos síntomas han sido considerados en el resultado de un proceso legal, no existen leyes específicas que apliquen de forma general a todos los casos que involucren cambios hormonales en mujeres durante su periodo premenstrual.

Desde una perspectiva científica, el SPM está relacionado con cambios hormonales y neuroquímicos que ocurren aproximadamente una semana antes del inicio de la menstruación, afectando el comportamiento, las emociones y la percepción del estrés (1). Antes de comenzar con las soluciones y prácticas, exploremos brevemente el "cóctel hormonal" que desencadena el SPM.

A lo largo del ciclo menstrual se desarrolla una danza de hormonas en las mujeres; los niveles de diversas hormonas (como el estrógeno y la progesterona) fluctúan enormemente. Los investigadores sugieren que ciertas mujeres pueden ser más sensibles a estos cambios y experimentar manifestaciones fisiológicas como: hinchazón, fatiga e incluso síntomas psicológicos como la irritabilidad, la tristeza y la ansiedad (2). Pero no nos quedemos sólo en datos científicos duros, abordemos esta situación con un tono suave y entretenido.

Un caso conocido es el de "R vs. Craddock", que tuvo lugar en el Reino Unido en 1980. La defensa de Sandie Craddock argumentó que sus acciones violentas fueron consecuencia de su SPM severo (3) Como resultado, fue condenada por un cargo menor de homicidio culposo en lugar de asesinato, aunque este veredicto fue posteriormente anulado y fue condenada por asesinato.

Otro ejemplo es el de "R vs. Smith", también en el Reino Unido, en 1981. En este caso, se alegó que la mujer involucrada sufrió cambios emocionales y de comportamiento debido a su SPM, lo que resultó en un asalto agravado. Luego de considerar los argumentos, su sentencia se redujo a seis meses en lugar de dos años (4).

Estos casos pueden haber influido en la jurisprudencia posterior en el Reino Unido. Sin embargo, en la mayoría de los países, el uso del SPM o TDPM como un atenuante para el comportamiento violento es poco común y no se encuentra en leyes específicas.

Según mi vivencia personal -no profesional-, aquí les entrego algunas recomendaciones para aligerar el ambiente y evitar que los cambios hormonales transformen el hogar en un campo de batalla mental y emocional:

a) No hay nada como el elixir mágico del cariño. A veces, un abrazo o unas palabras de aliento pueden ser ese bálsamo milagroso, aunque para algunos hombres, comprender esto puede ser como querer entender fisica cuántica.

b) Ofrecer apoyo y comprensión cuando la pareja experimenta cambios hormonales es trascendental y más efectivo que una serenata a las dos de la mañana. La serenata del entendimiento y la empatía nunca falla.

c) Mantener un entorno de apertura activa y comprensión, la pareja puede entender lo que está pasando y encontrar juntos soluciones para enfrentar los cambios y evitar discusiones innecesarias. ¡Ser una especie de Sherlock Holmes dela indagación emocional!

d) ¡Un helado no cae mal! ¿Por qué a algunas mujeres les encanta comer helados en gran cantidad, durante el periodo menstrual? Pueden echarle la culpa a las hormonas. Un estudio de 2016 sugiere que los cambios en los niveles de las hormonas estrógeno y progesterona provocan antojos de alimentos dulces y ricos en carbohidratos antes del periodo (5).

Como resultado de la escuela de la vida y mis interacciones con las mujeres de mi familia y mi pareja, he aprendido a usar ciertas herramientas para armonizar el ambiente:

a) El arte y la creatividad: pintar, escribir o incluso fotografiar pueden ser terapéuticos para quienes experimentan cambios hormonales antes y durante la menstruación, transformando ese "cóctel de hormonas", en una obra maestra.

b) La meditación y el yoga: practicar actividades que favorezcan la relajación y el autoconocimiento ayudará a manejar mejor los síntomas del SPM y aliviar las tensiones en el ámbito doméstico.

c) El humor y la risa: ver juntos una comedia en televisión o contar chistes puede cambiar positivamente la dinámica de la relación, reducir el estrés y liberar endorfinas que actúan como “analgésicos naturales” (6).

Es válido asumir que el síndrome premenstrual es solo una parte en la gran y enigmática biología de la mujer. No obstante, las acciones amorosas y comprensivas entre las parejas pueden ser el puente hacia la paz y armonía en estos momentos desafiantes. ¡Menos tormentas premenstruales y más amor! Recuerden que en asuntos de mujeres y hombres, es mejor hacer el amor y no la guerra.

Referencias bibliográficas:

  1. Eisenlohr-Moul, T.A. (2019). Hormonal Effects on Women’s Mood. Obstetrics and Gynecology Clinics, 46(1), 79-91.
  1. Klatzkin, R.R., Morrow, A.L., Light, K.C., Pedersen, C.A., Girdler, S.S. (2018). History of depression and women’s current health and functioning during midlife. Journal of Women & Aging, 30(3), 225-240.
  1. The Guardian. (2009). Killers, Women and the Syndrome Defence. Retrieved from https://www.theguardian.com/society/2009/feb/03/women-killers-syndrome-defence
  1. The Independent. (1993). Law Report: PMS Claimed as Defence in Battered Woman Appeal: R V Smith (Jennifer); Court of Appeal (Criminal Division). Retrieved from https://www.independent.co.uk/news/uk/law-report-pms-claimed-defence-battered-woman-appeal-r-v-smith-jennifer-court-appeal-criminal-division-1507526.html
  1. Menstrual cycle hormones, food intake, and cravings Menstrual cycle hormones, food intake, and cravings – Krishnan – 2016 – The FASEB Journal – Wiley Online Library The FASEB JournalVolume 30, Issue S1 p. 418.6-418.6
  1. Martin, R. A. (2001). Humor, laughter, and physical health: methodological issues and research findings. Psychological Bulletin, 127(4), 504-519.