A lo largo de la historia, hemos visto situaciones en la que diversos Presidentes con mucho poder, con grandes niveles de simpatías y que salen victoriosos en procesos electorales, sufren derrotas que afectan sus intereses políticos y provocan tristeza en sus estados de ánimo, luego de saberse los resultados finales. Veamos algunos ejemplos:
TRUJILLO Y RAMFIS: Para nadie es un secreto, que el dictador tenía debilidad por su hijo Ramfis. Siempre soñó con que su hijo se interesara por los temas políticos y militares y lo sucediera en la jefatura del Estado dominicano. Pero no ocurrió así. Ramfis siempre renegó de sus responsabilidades y quehaceres oficiales. Prefirió siempre la vida alegre. Dedicó más tiempo y atención a las mujeres, las bebidas alcohólicas, las fiestas y los juegos, que a la política y a sus deberes como heredero del tirano.
BALAGUER Y EMMA: Para las elecciones de 1978, Joaquín Balaguer iba en búsqueda de su tercera reelección consecutiva. Concentraba un gran poder político y militar en sus manos. A tal punto, que en medio del proceso electoral, los militares portaban cintas de color rojo en las puntas de sus fusiles, como muestra de apoyo político a Balaguer y al Partido Reformista.
Balaguer era soltero. Nunca se casó. Y su hermana, Doña Emma Balaguer de Vallejo, había jugado el rol de Primera Dama durante sus años de gobierno, y había ganado mucha popularidad por el programa de ayudas sociales que ella dirigía, llamado “la cruzada del amor”, razón por la cual, se le promovía como candidata a la sindicatura de la capital, sin embargo, a pesar de tener todo el apoyo del gobierno y de su hermano presidente, resultó derrotada, por el candidato del Partido Revolucionario Dominicano (PRD), Dr. Pedro A. Franco Badía.
SALVADOR Y ASELA: Para las elecciones de 1986, a raíz de la firma del “Pacto La Unión” que fue un acuerdo político a lo interno del PRD, redactado a puño y letra por la entonces Primera Dama, Doña Asela Mera de Jorge, firmado por los líderes del PRD de aquel entonces, el Presidente Jorge Blanco, Peña Gómez y Jacobo Majluta, para lograr salvar diferencias y presentar una inexistente unidad entre ellos, se decidió que la entonces Primera Dama de la Nación, fuera la candidata a senadora del distrito nacional, y a pesar de tener todo el apoyo del gobierno y de su esposo presidente, perdió del entonces reconocido empresario, don Jacinto Peynado, del Partido Reformista Social Cristiano.
DANILO Y YOMAIRA: Para las elecciones del 2020, la Diputada Yomaira Medina, hermana del entonces Presidente Danilo Medina, había sido Vice Presidenta y Presidenta de la Cámara de Diputados y aspiraba a ser la Senadora de su natal provincia de San Juan. Contó con el apoyo de su hermano y de toda la estructura del gobierno y del partido oficialista, para derrotar al incumbente, Senador Félix Bautista, hombre de confianza del ex presidente Leonel Fernández.
A pesar del apoyo de su hermano presidente, del gobierno y de los principales dirigentes del PLD, Yomaira fue derrotada en las primarias y no logró alcanzar la nominación.
ABINADER Y MORENO: Para las elecciones de 2024, se sabía por adelantado, que Abinader era el gran favorito y que su partido y el bloque de partidos aliados ganarían ampliamente la mayoría de los cargos electivos. Sin embargo, el Presidente, los principales funcionarios de su gobierno y el PRM casi de manera unánime, apoyaron al Dr. Guillermo Moreno como candidato a Senador del Distrito Nacional. Pero a pesar de todo el apoyo recibido, Moreno perdió y la capital tendrá en Omar Fernández, con apenas 33 años, al senador más joven de todo el país y de la historia.
Parecería una contradicción y una situación difícil de creer, sin embargo, ha sido una constante en la historia política dominicana, y entendemos que es parte de lo positivo del sistema democrático, y es que por mucha fuerza, poder y/o popularidad que un Presidente pueda tener en un momento determinado, no siempre le sale todo a pedir de boca, ni al 100% de sus deseos.