1.- Es posible que muchos seres humanos no lleguen a darse cuenta de que su vida material y espiritual depende del sistema que impera en el lugar de su nacimiento, lo mismo que el círculo familiar del cual les ha correspondido formar parte.
2.- Por el hecho de que no todas las personas tienen en su país las mismas condiciones de vida, algunas se ven impulsadas a abandonar su lar nativo hacia otros lugares en busca de mejor existencia.
3.- La persona nacional de un país, al moverse hacia otro, dependiendo del fin perseguido, arrastra consecuencias no previstas en las relaciones de los gobiernos.
4.- A lo largo de toda la historia de la humanidad se ha producido el fenómeno migratorio y las motivaciones pueden aparecer como de distintas índoles. Sin embargo, aunque dependan estas de un conflicto religioso, político o económico, tienen toda una causa única y esencial: la búsqueda de mejores condiciones de vida.
5.- Tal como está ocurriendo ahora, las migraciones de mayor significación son aquellas de carácter espontáneo que se han producido en los últimos tiempos, compuestas por personas de las regiones menos desarrolladas a países desarrollados.
6.- Aunque el fenómeno migratorio se puede considerar un asunto muy personal, tiene ribetes estatales porque es un proceso que toca muchos lados de la vida socioeconómica y política de los países, tanto de origen como de llegada.
7.- En la actualidad, la decisión tomada por el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, persiguiendo a los inmigrantes identificados como indocumentados, motiva cuestiones de relaciones diplomáticas.
8.- El fenómeno migratorio causado por crisis de desempleo, miseria, hambre y opresión en general, es muy propio en regiones del mundo como América Latina y el Caribe, caracterizadas por la desigualdad de oportunidades.
9.- La emigración ligada a la comunidad dominicana en territorio norteamericano es de naturaleza económica por el desigual desarrollo de los dos países. La pobreza del dominicano lo empuja a salir a buscársela.
10.- La voluntad política imperial de Donald Trump se ha descargado con mucha saña contra los inmigrantes en general y los dominicanos en particular.
11.- El gobierno dominicano, incondicional adepto de Washington, acepta de manera sumisa que los inmigrantes pobres dominicanos sean atropellados sin piedad.
12.- El inmigrante dominicano en Estados Unidos es tratado hoy como una bestia de carga y tiro en situación de desamparo, desprotección, sin un gobierno que a la distancia le defienda, aunque sea con palabras huecas.
13.- En el rostro de cada inmigrante dominicano amenazado de deportación está presente el temor, la pena, la angustia y cuantos pesares lesionan a un humano perseguido sin causa.
14.- Al inmigrante dominicano marcado para ser expulsado de Estados Unidos le queda entristecerse, estar atribulado, consternado y sin saber el instante de su deportación.
15.- En la lista de posibles enviados de regreso a su país de origen, está ese inmigrante sin protección, ausente de la solidaridad del gobierno de su país, sin apadrinamiento alguno.
16.- La independencia nacional y la autodeterminación del pueblo dominicano están limitadas a los deseos, a los intereses del capital monopolista de Estado norteamericano y sus ramificaciones.
17.- Mientras los dominicanos inmigrantes son perseguidos de manera cruel, el gobierno de aquí se comporta arrodillado, postrado, echado al suelo ante semejante cacería.
18.- Avergüenza la actitud del gobierno dominicano, de pura conformidad frente a los atropellos contra nuestros inmigrantes ejecutados por agentes de migración norteamericanos. Las autoridades de por aquí muestran desdén ante el sufrimiento de los nuestros.
19.- El gobierno dominicano está sordamente, como una misa; pasando en silencio; punto en boca; mudo, sin levantar la voz para reclamar respeto a la dignidad de nuestros compatriotas inmigrantes documentados o indocumentados.
20.- Los inmigrantes dominicanos en New York, Boston, Puerto Rico y otros estados y condados sufren y el gobierno dominicano obedece a la política de Donald Trump. Este sigue cazando a los inmigrantes, y el gobierno nacional acepta, acata, tolera, dejar pasar, y le dice a nuestros inmigrantes abusados: "Tengan aguante". Y nosotros debemos decir, así no, presidente Abinader, esos inmigrantes también son de los nuestros.