Cuando la democracia parece retroceder en muchos de los países de la región latinoamericana, producto, en parte, por la inflación generada por la pandemia de la COVID-19 y el enfrentamiento entre Ucrania y Rusia, la República Dominicana contiene la inflación y avanza en la democratización de sus instituciones, con un gobierno del cambio que no se detiene.
Polarización, crisis de gobernabilidad, alta inflación, afectación de los derechos humanos, sociales y políticos son males que impactan a las poblaciones de países como Argentina, Ecuador, Perú, Guatemala, Nicaragua, entre otros. Mientras en la República Dominicana, la inflación fue contenida gracias a la articulación de medidas macroeconómica tradicionales, como el alza de las tasas de interés y la reducción de circulante, a la vez que se protegió la capacidad de consumo de la población a través de los subsidios a los combustibles y la energía eléctrica, así como de otro conjunto de subsidios dirigidos a la población más vulnerable teniendo como principal resultado la reducción de la pobreza monetaria.
Al terminar el 2022, el gobierno del cambio había destinado RD$ 85.9 mil millones en subsidios como parte de las medidas adoptadas para reducir el efecto de los aumentos en el nivel de precios, protegiendo a la población. El 48.8 % del monto (RD$ 41.96 mil millones) correspondía a las transferencias al sector eléctrico, que paralizó de forma temporal el incremento de la tarifa energética de los hogares dominicanos; con esto se evitó un incremento promedio de 1.5 puntos porcentuales en el nivel de inflación.
En magnitud, le siguieron los subsidios a los combustibles, que representaron el
40.9 % (RD$ 35.1 mil millones) de los recursos destinados. El 10.3 % restante se distribuyó entre subsidios a fertilizantes, alimentos y extensión de programas sociales para mantener el poder adquisitivo de los hogares dominicanos.
La verdad hay que decirla, sin los subsidios implementados por el gobierno no se hubiera reducido la pobreza en los niveles históricos que hoy se exhiben. Los boletines trimestrales de pobreza monetaria en República Dominicana del Ministerio de Economía Planificación y Desarrollo, MEPYD, correspondientes a los tres primeros trimestres del año 2023 presentan las tasas de pobreza monetaria más bajas desde el año 2016 (24.4% para el trimestre julio – septiembre 2023).
El año 2024 encontró a la República Dominicana en un contexto de estabilidad macroeconómica, con una reducción histórica de la pobreza monetaria; siendo un año electoral, con una Junta Central de Electoral con su credibilidad recuperada; con el desarrollo de Pedernales viento en popa; ya iniciado el proceso de implementación del plan de ordenamiento territorial y, por primera vez en muchos años, comenzando a mejorar los indicadores educativos; amén de iniciada la reforma policial, con mejoras sustanciales en las condiciones de vida de sus miembros, y fortalecimiento de su formación.
4 años en los que el gobierno del cambio no detuvo su marcha, continuado el impulso del desarrollo del país, a la vez que fueron sorteadas dos de las mayores crisis mundiales de la historia reciente: la pandemia de la COVID-19 y la crisis de suministros producto de la guerra entre Rusia y Ucrania.