Los campos de refugiados son lugares temporales que brindan refugio y ayuda inmediata a personas que deben dejar sus hogares por conflictos, persecución o violencia. A pesar de ser provisionales, son fundamentales al ofrecer un entorno seguro para cubrir necesidades básicas como comida, agua, alojamiento, atención médica y otros servicios esenciales durante crisis y situaciones desesperadas.
Convertirse en refugiado es un desafío, pero con apoyo en el nuevo lugar se puede mitigar el impacto. Se propone el retorno de migrantes haitianos a Haití mediante santuarios respaldados por la ONU y financiados por corporaciones internacionales. Esta medida busca aliviar la carga de acoger a estos migrantes en la República Dominicana, que carece de recursos para ello. Es esencial un enfoque innovador en el diseño de los campos de refugiados, incluyendo formación técnica y facilitando instalaciones para el entrenamiento de los residentes, permitiéndoles integrarse en el mercado laboral industrial.
Ante la controversia generada por las recomendaciones de la ONU acerca de los campos de refugiados para haitianos en la República Dominicana, el Presidente Abinader podría poner en marcha un plan para reubicar a los migrantes haitianos irregulares en campamentos inteligentes para desplazados en Haití. Esta medida se presenta como una oportunidad significativa para reducir la presión sobre el presidente y hacer frente al gran flujo de haitianos indocumentados hacia la República Dominicana.
Este plan tiene como objetivo evitar la retención, y reubicar hasta 37,000 migrantes haitianos que cruzan nuestra frontera hacia territorio dominicano anualmente. Se propone la creación de nuevas instalaciones en diferentes localidades como la Isla Tortuga, Gonave, Cayemite, Port Liberte, Gran Planicie y Jacmel, como una medida efectiva para gestionar la crisis sin impactar a otros países que también enfrentan un éxodo masivo de emigrantes haitianos. Este enfoque podría resolver la compleja situación entre Haití y la República Dominicana, brindando a Haití la oportunidad de convertirse en un modelo de comunidad de desarrollo sostenible con campamentos para desplazados y nuevas ciudades bajo un nuevo enfoque de desarrollo económico inteligente.
Con la implementación de este plan, es relevante resaltar los beneficios de establecer una estructura de asentamientos que podría funcionar como campamentos inteligentes de formación técnica. Las escuelas vocacionales presentes en los campamentos ofrecerán cursos en el ámbito industrial a los residentes. Este enfoque se convertirá en el nuevo modelo económico de desarrollo técnico esperado por Haití, al mismo tiempo que proporcionará un alojamiento temporal a todos los desplazados por la violencia.
Alrededor de un tercio de las 83.3 millones de personas desplazadas en todo el mundo debido a persecución, conflictos y violencia residen en campos de refugiados formales, principalmente en África. Aunque en algunos países los refugiados están obligados legalmente a vivir en estos campos, la mayoría elige residir fuera de ellos. Por ejemplo, en Jordania, menos del 25% de los casi 1.4 millones de refugiados registrados (principalmente sirios) se encuentran en los principales campos de refugiados del país; el resto vive en áreas urbanas y rurales. Este hecho demuestra que los campos de refugiados no pueden dar cabida a todos los solicitantes de asilo que buscan ingresar a un país, ya que la mayoría logra evitarlos.
Se sugiere que una presencia militar de la ONU este a cargo de la seguridad de los nuevos campamentos inteligentes para desplazados, ya que podría ser más efectiva para evitar que los residentes abandonen el campamento, aunque con autorización, los refugiados pueden entrar y salir libremente, recibiendo asistencia y protección humanitaria.
Los nuevos campamentos inteligentes en los que la población desplazada será reubicada en Haití serán centros que ofrecerán a sus habitantes:
– Refugio: Incluye tiendas de campaña, refugios temporales o estructuras más permanentes.
– Servicios básicos: Proporciona acceso a agua potable, saneamiento (baños y letrinas), instalaciones de lavandería, entre otros.
– Alimentación: Distribución de alimentos y cocinas comunales.
– Atención médica: Ofrece servicios de clínicas, personal médico y suministros médicos básicos.
– Educación: Espacios educativos temporales para niños y adultos.
– Seguridad: Presencia de personal de seguridad, policía o fuerzas de paz para garantizar la protección de los refugiados.
– Servicios sociales: Incluye apoyo psicosocial, asistencia legal, programas de género, entre otros.
– Infraestructura: Desarrollo de caminos, iluminación y áreas comunitarias.
Además, se pondrá en marcha un modelo económico de desarrollo sostenible en estas comunidades fundamentales, las cuales serán la base de la nueva estructura técnica en Haití. Se establecerán escuelas vocacionales para capacitar a los residentes en la industrialización del país y cubrir la demanda mundial de técnicos especializados.
El concepto de campamento inteligente para desplazados, se visualiza como una nueva estrategia de desarrollo económico, brindando posibilidades para el libre mercado mediante la mejora de infraestructuras, el suministro de necesidades esenciales, la creación de oportunidades laborales, la exploración de nuevos mercados y la aplicación de enfoques innovadores.
La integración socioeconómica de los desplazados resulta crucial para su protección y puede generar beneficios económicos, lo cual podría tener un impacto positivo en el futuro desarrollo industrial de Haití tras su proceso de pacificación.
La intervención de las Naciones Unidas y las corporaciones internacionales que donaran recursos económicos en la planificación y establecimiento de estos campamentos en Haití, facilitarán la provisión oportuna de asistencia humanitaria esencial, como alimentos, suministros médicos, alojamiento, otros recursos fundamentales y la preparación técnica para la industria. Este enfoque directo sería crucial para abordar la crisis de desplazados en Haití, evitando la necesidad de trasladarla a la República Dominicana.
NOTA: El autor del artículo, un arquitecto, urbanista y diplomático con experiencia en gobernanza global y diplomacia, ha creado un plan que se presentará en el futuro al poder ejecutivo de la República Dominicana y a las Naciones Unidas. Este plan propone una nueva alternativa a la política actual de ubicar campos de refugiados haitianos en la República Dominicana. El arquitecto Moreta sugiere la creación de campos inteligentes para desplazados en Haití, basados en un modelo de urbanismo sostenible y desarrollo económico industrial para el pueblo haitiano.