Los objetivos generales de la entrega de estos cinco artículos fueron aportar a un  debate jurídico sobre la delimitación  del mar, nuestra condición jurídica privilegia en condición de Estado especial. Un análisis histórico del desarrollo del derecho internacional desde los primeros pensadores, examinando declaraciones y tratados, la reglamentación interna, la protección de los recursos vivos y no vivo del mar. Otro objetivo es el análisis de la labor de las Naciones Unidas, a través del trabajo de la Comisión de Derecho Internacional, las conferencias especializadas hasta abordar la importante Tercera Conferencia sobre el Derecho Internacional del Mar, (CONVEMAR),1982.

La delimitación del mar como hemos visto a lo largo de estas entregas corresponden, no solamente a una visión meramente de coyuntura más bien, es en base a un largo proceso histórico que evoluciona a través de la codificación del Derecho Internacional del Mar, en su más hermosa expresión que lo es Convención Sobre El Derecho Del Mar.

En ella encontramos las pautas para la delimitación del mar, atendiendo a diferentes criterios como la línea de base recta, la línea de  archipiélago, en el caso nuestro como Estado declarativo de la condición archipelágica mostrada claramente, en uno de los artículos anteriores.

La delimitación con los Países Bajos debe hacerse siguiendo las líneas de base archipelágica. Esto no permite primero preservar los recursos vivos y no vivo del Estado dominicano, y segundo prepararnos para futuras negociaciones como son la delimitación marítima con Gran Bretaña donde las islas Turcas y Caicos son fuentes de debate y de interés estratégico por los recursos que encuentran en el fondo marino. Así como también tener una base sólida para la determinación del derecho del mar en relación a los Estados Unidos; en virtud de lo que Estados Unidos no reconocen la condición de declaración de líneas archipelágica establece de nuestra declaración unilateral.

Si logramos en los dos primeros acuerdos  Países Bajo y Gran Bretaña hacerlo sobre la base de línea archipelágica ,entonces estaremos en excelentes condiciones para establecer un acuerdo con Estados Unidos.

El presente el artículo por ejemplo hemos hecho un aporte ilustrado (Mapa anexo), donde vemos cómo las líneas archipelágicas  conectan de punto a punto, y se hace sobre la base de una línea  recta, pero tocando el punto exterior de tal forma que el Estado se beneficia de las aguas archipiélagos en una mayor extensión contribuyendo al interés Nacional.

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Hemos vivido y seguimos viviendo de espalda al mar. Nadie se plantea desarrollar un sector pesquero nacional fuertemente equipado que supere la pesca tradicional, y artesanal, hasta ahora vemos el mar con una simple oportunidad de atraer turistas en nuestras bellas playa, eso está bien. Pero es necesario mirar hacia delante y como tenemos zonas y puertos de aguas profundas, sería estratégicamente importante superar la visión inmediatista, cortoplacista de un Estado como el nuestro, que todo lo quiere para hoy; y comenzar a explorar la posibilidad de instalar una marina que pueda desarrollar y explotar los recursos vivos en el mar territorial y en nuestra amplia zona de Estado archipelágico. Solo falta una visión de nación, para empezar, a navegar de nuevo sobre el futuro promisorio que pudiera generar una acción estratégica de Estado.