Rafael Caldera, nació en San Felipe, Estado Yaracuy, en Venezuela, el 24 de enero de 1916, y murió en Caracas, Venezuela, el 24 de diciembre de 2009, fue un abogado, sociólogo, escritor, orador, humanista y político venezolano, presidente de su país en dos ocasiones, entre 1969 y 1974, y entre 1994 y 1999, y senador vitalicio de la República.
El 31 de octubre de 1958, rigiendo una Junta de Gobierno cívico-militar del vicealmirante Wolfgang Larrazábal Ugueto, el Dr. Rafael Caldera convocó en su residencia, llamada “Puntofijo” a los principales dirigentes de su partido COPEI, al partido Acción Democrática (ADECOS), y la URD para la firma del que iba a pasar a la historia venezolana como el” Pacto de Punto Fijo”.
Conocí personalmente al Dr. Rafael Caldera, a mediados del año 1961, cuando un grupo de 8 jóvenes dominicanos, exiliados de la dictadura de Rafael Leónidas Trujillo, nos reunimos en Venezuela para realizar un curso de larga duración para formarnos en política, sindicalismo, asuntos juveniles y campesinos, La primera conversación fue en su residencia, cuando nos invitó a Henry Molina y a mí, para conversar sobre asuntos políticos.
En la segunda conversación el Dr. Rafael Caldera me dijo, que en febrero de ese año había estado en Alemania, y le había solicitado una cooperación al Canciller Konrad Adenauer, para formar un Instituto de Formación Política, para jóvenes lideres de América Latina. Así, con ese curso internacional con jóvenes dominicanos, él fundó el Instituto de Formación Demócrata Cristiana (IFEDEC),.
El 10 de julio de 1962 se creó el Instituto Internacional de Formación Demócrata Cristiana (IFEDEC), centro de formación política, donde se formaron los principales dirigentes jóvenes políticos, de la democracia cristiana, de América Latina y el Caribe, que contó con los aportes intelectuales de Rafael Caldera, Pedro Pablo Aguilar, Arístides Calvani. Luis Herrera Campíns, Valmore Acevedo, Eduardo Fernández y otros altos políticos de América Latina.
Centenares de jóvenes políticos dominicanos, hombres y mujeres, estudiaron y se formaron en el IFEDEC, y fueron dirigentes del Partido Revolucionario Social Cristiano.
En otra conversación con el Dr. Rafael Caldera, le solicité que me dijera cuales eran los escritores socialcristianos que yo debía leer; Él me recomendó leer a Jacques Maritain, y Emmanuel Mounier, franceses, y al italiano Giorgio La Pira. Así lo hice, y he continuado leyéndolos.
Durante el curso sociopolítico que organizaron la central sindical CLASC y el partido político COPEI, conversaba todas las semanas con el Dr. Rafael Caldera, él iba a darnos clases los jueves en la tarde y la noche, y cenaba con los dominicanos participantes en ese curso. ¡Fueron muy provechosas sus conversaciones, tanto a nivel personal, como colectiva del grupo!
Después de terminado el curso durante un tiempo mantuvimos relaciones por correspondencias, para explicarle cómo funcionaba el sindicalismo en la República Dominicana
El 1 de diciembre de 1968, Caldera fue elegido presidente de Venezuela.
A principios de 1969, el presidente Rafael Caldera, nos invitó a Henry Molina y a mí, a su toma de posesión como presidente de Venezuela, por nuestros cargos sindicales en la República Dominicana, y como alumnos de él. En esa ocasión tuvimos la oportunidad de conversar nuevamente
En su primer período de gobierno, Caldera, inauguró una política de reformas desarrollistas tendente a superar la exclusiva dependencia del petróleo y el gas natural, ya que el 90% de los ingresos de la balanza comercial procedían de la exportación de los combustibles fósiles, y a crear industrias complementarias.
El libro “Especificidad de la Democracia Cristiana”, escrito por el Dr. Rafael Caldera, es el texto de un curso dictado por él, en los años 1966-1967, en el Instituto de Formación Demócrata Cristiana (IFEDEC) de Caracas. Precisa cuáles son los elementos característicos de la doctrina de la Democracia Cristiana, que permiten identificarla integralmente.
Esta obra es fundamental en los programas de formación sobre Democracia Cristiana y Economía Social de Mercado. De forma pedagógica, esquematizada, digerible, el Dr. Caldera aporta a América Latina y al mundo una síntesis precisa de la identidad política social cristiana.
En el año 1973 tuve una conversación con el Dr. Rafael Caldera, en Caracas, Venezuela, siendo él presidente de su país, que fue muy conflictiva; Él era uno de los que proponían la unidad del Partido Revolucionario Social Cristiano, con el partido del Dr. Joaquín Balaguer, y me solicitó que apoyara esa posición. Con todo el respeto, le dije que no, que yo estaba convencido que el Dr. Balaguer no era socialcristiano, sino “balaguerista”,
Yo era en esa ocasión el secretario general de la Confederación Autónoma Sindicatos Cristianos (CASC). No llegamos a ningún acuerdo, pero a partir de esa fecha me desvinculé del Partido Revolucionario Social Cristiano (PRSC), y nunca he vuelto a pertenecer a ningún partido político.
El 1 de julio de 1981, Rafael Caldera rindió un homenaje en las tumbas de Raissa y Jacques Maritain, en Kolbsheim, Alsacia, Francia. Un homenaje a su orientador en la política y el humanismo cristiano.
El Dr. Rafael Caldera, de profunda y permanente vocación social, quien, en gesto excepcional e inédito, fue invitado en 1987 por el Papa Juan Pablo II al Vaticano para hablar ante el Colegio Cardenalicio en la conmemoración de los veinte años de la encíclica “Populorum Progressio” (Sobre el desarrollo de los Pueblos”).
El 5 de diciembre de 1993, el Dr. Rafael Caldera, ganó por segunda vez la presidencia de Venezuela, se impuso con el 30,5% de los sufragios a una larga lista de adversarios que encabezaban el adeco Claudio Fermín Maldonado, el copeyano Oswaldo Álvarez Paz y Andrés Velásquez, por La Causa Radical.
Rafael Caldera y Eduardo Frei Montalva, han sido los dos presidentes socialcristianos, más conocidos, sin embargo la democracia cristiana ha tenido varios presidentes en América Latina y el Caribe, entre ellos; En Chile, en el año 1964 Eduardo Frei Montalva, Patricio Aylwin Azócar (1990-1994) y Eduardo Frei Ruiz-Tagle (1994-2000),
En Venezuela Rafael Caldera y Luis Herrera Campins; y en República Dominicana Joaquín Balaguer por varios periodos. Es necesario aclarar que ni en la primera elección de Balaguer, como presidente de la República, ni en los “12 años seguidos”, Balaguer no pertenecía a la democracia cristiana.
En América Central, varios socialcristianos fueron presidentes en sus países, entre ellos; José Napoleón Duarte, en El Salvador, 1984-1989, Marco Vinicio Cerezo, en Guatemala, 1986-1990), en Costa Rica; Rafael Ángel Calderón (1990-1994), Miguel Ángel Rodríguez 1998-2002), y Abel Pacheco de la Espriella (2000-2006).
No pude darle seguimiento a su segundo mandato, pues en 1992 me fui a vivir a Europa, y en esa época las noticias sobre América Latina eran muy limitadas, sin embargo, no fue un gran gobierno, como el primero.
Es cierto que Caldera dictó el sobreseimiento de liberar a Hugo Chávez, cuando la popularidad de este no llegaba a 4 puntos en las encuestas y que también lo hizo para veinte militares más incursos en la misma causa. En la toma de posesión de Hugo Chávez, como presidente sucesor de Rafael Caldera, lo menospreció: no le dio las manos, ni aceptó que le impusiese la banda presidencial.
Cuando falleció el Dr. Rafael Caldera su familia prohibió que el gobierno de Hugo Chávez le rindiera un homenaje oficial, por el mal trato que le dio ese gobierno.
El Dr. Rafael Caldera, fue mi profesor en política, un gran ser humano, capacitado, inteligente y un modelo en los sectores de la democracia cristiana.