Leer la prensa (hace años no lo hago en papel) y ver los noticieros televisivos es un vicio que conservo desde mi juventud. Antes incluso me dormía o levantaba escuchando noticieros radiales locales y muchos en onda corta. ¡Ah tiempos aquellos! Las llamadas redes sociales rara vez las sigo -y cuando lo hago soy muy selectivo- ya que el anonimato de nombres ficticios y los bots, cargados de noticias falsas y los odios viscerales de energúmenos envenenan la mente y la mía no es un basurero. Por eso decidí hoy repasar algunas de las noticias más relevantes y ubicarlas con claridad y precisión.
La enorme ventaja del PRM para las elecciones presidenciales de mayo es producto de la división del PLD y la insensata actitud de Danilo Medina de escoger candidatos presidenciales malísimos tanto para el 2020 como para este año. Muchos suponen que ha decidido ser el sepulturero de una de las obras organizativas más relevantes de Juan Bosch. Del otro lado un Leonel Fernández, que seguro quedará en segundo lugar, sigue obsesionado con volver a la Presidencia, a lo Balaguer, no a lo Bosch, y por tanto contribuye con Medina a enterrar lo que queda de ese espectro político. Semejante le pasó al PRD en el periodo 1978-1986 y hoy dicho partido es un colmadito a la venta de su presidente. En poco tiempo veremos a Medina en ese rol con el trocito que conserve del partido morado.
La guerra de Ucrania fue un proyecto de la administración Biden mucho antes de ganar las elecciones del 2020 y hereda esa tarea de Obama. La crisis que comenzó en el 2013, con raíces previas, fue un intento de la OTAN de ir arrinconando a Rusia en su frontera del sur de Europa, y se invirtieron ingentes recursos en derrocar con violencia al liderazgo político ucraniano pro-ruso y preparar el escenario para una guerra. Con Trump no fue posible llegar a los niveles que se deseaba por su alianza con Putin. Hoy día la guerra de Ucrania, liderada por un payaso de un lado y un vulgar tirano del otro lado, sigue consumiendo miles de millones de dólares, impulsa la inflación en todo el mundo y son los ucranianos y rusos los que ponen los muertos.
El conflicto entre el gobierno de extrema derecha de Israel y la organización integrista musulmana Hamas (están hechos el uno para el otro), ha ocasionado tres grandes crímenes contra la humanidad: los más de mil muertos en el asalto del 7 de octubre del 2023, el secuestro de más de un centenar de personas y el genocidio contra la población palestina. Tomar partido por uno u otro es perverso. Propagar que es una guerra entre los israelíes y palestinos es vulgar propaganda. Reconocer que no habrá solución sin la existencia de dos Estados es lo más sensato que se puede decir, pero ambos pueblos deben procurar liderazgos más inteligentes y comprometidos con el bienestar de sus respectivas sociedades.
Estados Unidos está empantanado en una crisis política grave. El liderazgo máximo para las elecciones de final de este año son dos ancianos con graves limitaciones para impulsar cambios positivos para dicho país -y por extensión a gran parte del mundo. Un Biden disminuido física y mentalmente, un Trump cada vez más irascible y errático en sus pronunciamientos, y un sistema electoral que ha llegado al límite de su capacidad para validar procesos de escogencia en el contexto de una democracia representativa, pronostica una larga crisis postelectoral. La derechización absurda de los republicanos ha minado la capacidad de diálogo en el seno del Congreso y en la mayor parte de los estados de la Unión. Los casos de Florida y Texas serían circenses si no fuera porque están destruyendo valores como la libertad de pensamiento y el reconocimiento de la dignidad de todo ser humano.
Si al inicio algunos pensaron que el caso Milei era asunto psiquiátrico, hoy no hay dudas que es un sinvergüenza populista que ejecuta una política económica que genera más miseria en la Argentina con tal de que los “numeritos” al que atienden el FMI y Wall Street se ajusten a sus modelos. Es indudable que un Milei es el punto de caída de un tobogán al que lanzaron ese pueblo los Kirchner. La apelación al peronismo como recurso ideológico, a favor o en contra, no da de comer a los argentinos y las argentinas.
Por último el aprendiz de Bukele en el Ecuador ha demostrado una incapacidad terrible de gestionar el tema de la seguridad, el narcotráfico y la persecución contra la corrupción de anteriores gobiernos. Noboa, con la invasión a territorio mexicano, ha perdido todo el respaldo internacional a su gestión de transición y perdió también el respaldo que estaba recibiendo de todos los partidos en el Congreso para que pudiera implementar las medidas que había anunciado. Por supuesto perdió desde ya las elecciones del año que viene. Ecuador viene arrastrando gobiernos malos y autoritarios: desde Lenín Moreno, pasando por Guillermo, hasta llegar a Noboa, y eso va debilitando la democracia en dicho país. La obsesión de los tres por la popularidad de Correa, que vive tranquilamente en Bélgica, los lleva a tomar decisiones absurdas como la invasión a una embajada extranjera.