1.- Toda persona está interesada en conocer la verdad de lo que ocurre, ha acontecido en su lar nativo o en el extranjero, porque el que permanece desconociendo llega a convertirse en un ignorante.
2.- Debe ser reconocido como valioso ese que hace posible tener conocimiento de la verdad que se le oculta a los demás, porque el que pone la realidad al alcance de la humanidad proporciona entendimiento.
3.- El que engaña tapando lo que sucedió, hace la función de abusador, no así el que es veraz y se afana para que todos estemos fielmente orientados, bien encausados.
4.- Hasta el momento que Julian Assange puso a circular por el mundo la verdad contenida en documentos que Estados Unidos tenía ocultos, nadie sabía de las atrocidades llevadas a cabo por miembros del ejército estadounidense en Irák y Afganistán.
5.- La gente buena merece saber que Julian Assange, no robó, ni utilizó medios violentos para tener en sus manos los papeles escritos en los cuales estaban las verdades hasta ese instante invisibles para la humanidad. Assange vino a efectuar la función de mostrarle al mundo la constancia, la exactitud de lo comprobado.
6.- Porque Julian Assange adquirió los documentos en su condición de periodista investigador, y los papeles son auténticos, imposible de impugnar, a él se le quiere sancionar porque puso en claro, iluminó lo que Estados Unidos a la opinión pública mundial le tenía a oscuras para que no lo viera.
7.- Los mismos que ahora mantienen preso a Julian Assange, fueron los que ordenaron crímenes, los ocultaron y hoy encierran, mortifican y pretenden condenar a muerte a quien dio a conocer esos hechos que causan horror.
8.- Nada censurable hizo Julian Assange, para obtener y poner a circular los escritos que sirvieron para que mujeres y hombres de honor y sanos sentimientos, supieran lo que hacen cerebros diabólicos para preservar intereses mezquinos.
9.- Diferentes argumentos han sido puestos en práctica por Estados Unidos, para mortificar a un hombre que, como Julian Assange, lo único que hizo fue presentar, exhibir lo que estaba tapado por el autor de lo mal hecho.
10.- Porque no hay base legal, ni instrumento jurídico alguno para justificar una sanción contra Julian Assange, se ha recurrido a un mamotreto de ley norteamericana de 1917, de cuando la Primera Guerra Mundial, relacionada con el espionaje, para ahora condenar Assange a 175 años de prisión.
11.- Haciendo uso de recovecos malditos, los ideólogos jurídicos del imperio pretenden, extendiendo una sucia cuerda, enlazar a Julian Assange, con un tratado de extradición británico-norteamericano, que no prevé la extradición en los casos tipificados como políticos.
12.- Para no vincular el caso de Julian Assange como político, el imperio procura darle al expediente un tinte de delito común, al no presentarlo como lo que es, un periodista investigador, sino como un espía.
13.- Procede la pregunta, ¿para quién hacía Julian Assange, acción de espionaje?, ¿qué acechaba?; ¿quién le pagó para poner a circular los documentos?; a quién, que no fuera a la opinión pública mundial, favoreció difundir, por medio de WikiLeaks, los papeles que Estados Unidos tenía escondidos.
14.- Nadie, ninguna persona resultó lesionada con la publicación que hizo Julian Assange, de los documentos que llegaron a sus manos de manera graciosa, como un acto de afabilidad a la humanidad.
15.- Que cada quien se detenga a pensar detenidamente que está en libertad Bradley Manning, hoy exsoldada Chelsea Manning, quien voluntariamente entregó los documentos a Julian Assange; están libres los dueños y directores de los periódicos que hicieron las publicaciones, y libre como el viento está la población mundial que tuvo acceso a su lectura. Ahora solamente se desea condenar a Assange.
16.- Por último, tampoco están siendo procesados, ni en prisión, los que se beneficiaron y los que participaron en los horripilantes crímenes dados a conocer por medio de los documentos por los cuales se quiere condenar al encierro, de por vida, a Julian Assange.