El ministro polaco de Relaciones Exteriores, Radoslaw Sikorski, pidió el martes "indemnizaciones financieras" de Alemania por las atrocidades cometidas por los nazis, haciéndose eco de unas exigencias expresadas por el anterior gobierno.

Sikorski, nombrado en el cargo en diciembre cuando se formó el actual Ejecutivo proeuropeo, hizo estas declaraciones en Berlín, adonde acudió para reunirse con su homóloga alemana Annalena Baerbock.

Entrevistado por la televisión alemana Welt TV tras su reunión con Baerbock sobre la cuestión de las indemnizaciones reclamadas por el gobierno anterior, de talante nacionalista conservador, por los abusos de los nazis, Sikorski comentó: "lo que Alemania le hizo a Polonia durante la Segunda Guerra Mundial fue terrible y cruel".

Según él, sería útil que Alemania "encuentre una forma creativa de expresar ese sufrimiento, expresar arrepentimiento y hacer algo bueno por las personas que sobrevivieron a ese periodo".

"Y esta reflexión ética sobre el pasado debería traducirse luego en una compensación financiera", señaló, aunque no precisó ninguna cuantía.

Esa cuestión envenenó las relaciones, ya tensas, entre el gobierno alemán y el anterior Ejecutivo polaco, que consideraba que Berlín debía indemnizar a sus ciudadanos con hasta 1.300 millones de euros (1.400 millones de dólares).

Alemania considera que Polonia renunció a las indemnizaciones de guerra en 1953 y que confirmó esa renuncia en varias ocasiones.

Polonia firmó en 1953 una declaración en la que renunciaba a las reclamaciones de reparación independientes de Alemania y la declaración fue luego confirmada por el primer gobierno democrático de Tadeusz Mazowiecki (1989-1991) y los gobiernos de Leszek Miller (SLD) en 2004 y Beata Szydlo (PiS) en 2017.