Un juez de Bolivia ordenó este viernes la aprehensión de Evo Morales, luego de que el expresidente no se presentara por segunda vez a la audiencia en la que se debía resolver un pedido de prisión preventiva por el presunto caso de trata de una menor durante su mandato (2006-2019).
"Se dispone (que) se libre mandamiento de aprehensión en contra del imputado (Evo Morales)", dijo este viernes Nelson Rocabado, juez de Tarija (sur), al dar a conocer su resolución en una audiencia pública transmitida por el canal estatal de televisión.
La fiscalía, que acusó formalmente a Morales del delito de trata de personas, ya había emitido una orden de detención contra el exmandatario en octubre de 2024, durante la fase de investigación, para que sea conducido a declarar a una sede del Ministerio Público.La nueva orden de aprehensión es para que se presente ante el juez que dirige la causa.
Durante la audiencia, Rocabado también declaró en rebeldía al líder cocalero.
"Está declarado rebelde. ¿Qué significa esto? Que el juicio se va a suspender hasta que él aparezca", dijo a la prensa Sandra Gutiérrez, fiscal del caso, al término de la diligencia.
Nelson Cox, abogado de Morales, cuestionó la decisión en contra de su cliente. "Es un proceso absolutamente forzado", sostuvo ante los periodistas.
Enfatizó que en este caso "no hay víctima", pues la supuesta afectada no ha denunciado al expresidente por el delito de trata.
Durante la audiencia, el juez también congeló los bienes del político y prohibió su salida de Bolivia.
La audiencia debió desarrollarse el martes, pero Morales no se presentó. Sus abogados alegaron problemas de salud.
La defensa presentó certificados que le diagnosticaban bronconeumonía y bradicardia.
Sin embargo, el juez rechazó este viernes esos informes. Según Gutiérrez, los documentos médicos presentados por la defensa y evaluados por Rocabado "no son impedimentos jurídicos valederos" que justifiquen su inasistencia.
– Bajo resguardo –
Según el Ministerio Público, Morales inició una relación con una menor de 15 años en 2015, cuando era presidente. Los padres de ella consintieron la unión en un intercambio de favores. Fruto de la relación nació una hija un año después.
De acuerdo con el expediente, los padres de la menor la inscribieron en la "guardia juvenil" de Morales "con la única finalidad de escalar políticamente y obtener beneficios (…) a cambio de su hija menor".
Morales, de 65 años, rechaza los cargos y argumenta que una investigación por los mismos hechos fue desestimada en 2020.
En esa ocasión fue investigado por estupro, un delito que implica acceso carnal con una menor de 14 a 18 años. Esta vez la fiscalía se concentra en un caso de presunta trata.
De ser condenado, Morales enfrenta a una pena -según la fiscalía- de 10 a 15 años de prisión.
La policía no ha ejecutado la orden
Aunque su paradero es público, la policía no ha ejecutado la orden de aprehensión de la fiscalía.
El expresidente se encuentra desde septiembre en el Trópico de Cochabamba, su feudo político en el centro del país, bajo la protección de sus partidarios, que aseguran haber montado varios "anillos de seguridad" para impedir su detención.
"La seguridad del hermano Evo, en este momento" está a cargo de más "de 2.000 personas, todos los días y las 24 horas", dijo el miércoles a la AFP Vicente Choque, de la Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia y uno de los hombres más cercanos al ex jefe de Estado.
Desde que salió a la luz el proceso, Morales sostiene que es víctima de una "brutal guerra jurídica" orquestada por el gobierno de Luis Arce, su exministro y exaliado.
Ambos están enfrascados en una intensa lucha por el control del partido oficialista y por el liderazgo de la candidatura presidencial de la izquierda.
Morales lo acusa de intentar "proscribirlo" de la carrera electoral de agosto próximo, aunque la justicia en noviembre restringrió sus ambiciones políticas, al limitar la reelección por más de dos gestiones de gobierno.
Evo dice quieren "eliminarlo" de las elecciones
Evo Morales dijo este viernes que sus acusadores no buscan justicia, sino "eliminarlo" para las próximas elecciones, después de que un tribunal lo declarara "en rebeldía" e instruyera una nueva orden de captura tras no presentarse a una segunda audiencia por un caso de trata agravada de personas.
"Esta 'justicia' actúa como en tiempos de la inquisición: sin pruebas, sino con convicciones subjetivas. Mis acusadores no buscan justicia, quieren proscribirme e eliminarme ante las próximas elecciones presidenciales de Bolivia", publicó el exmandatario en su cuenta X.
El juez a cargo del caso, Nelson Rocabado, estableció esta jornada que también se debe aplicar al exmandatario un "arraigo nacional", darle una notificación por edicto de la resolución de rebeldía, la emisión de un mandamiento de aprehensión, la anotación preventiva de bienes y la congelación de sus cuentas.
"Solo faltó que ordenen mi descuartizamiento inmediato en una plaza, como ocurría en la Colonia cuando los conquistadores castigaban severamente a los indígenas revelados contra la opresión", escribió Morales.
Además, aseguró que la declaración de rebeldía en su contra "ya estaba redactada antes de la audiencia" y que "seguramente fue enviada por los ministerios de Gobierno (Interior) y de Justicia para que la lea el juez".
"Denuncio al mundo que me persigue y me condena en tiempo récord, una 'justicia' parcializada y servil al Gobierno de (Luis) Arce y (David) Choquehuanca, que tiene dominado a todo el Órgano Judicial", añadió el expresidente.
Sandra Gutiérrez, la fiscal departamental de Tarija, región sureña donde se investiga el caso, señaló que se ingresa a una "nueva etapa" del proceso, por lo que la orden de aprehensión fiscal que se dictó en contra de Morales el 16 de octubre del año pasado "queda sin efecto" y ahora rige la orden del juez.
"Los que me acusan están acusados de ser los verdaderos autores de trata y tráfico, pero nadie se atreve a iniciarles un proceso porque el régimen del terror que gobierna nuestro país, los amenaza", dijo también Morales.
Previo a la resolución de rebeldía, el juez denegó una recusación que planteó la defensa de Morales bajo el argumento de que la autoridad judicial habría actuado con falta de imparcialidad en el proceso.
(Con informaciones de EFE y AFP)