El histórico temporal Elliot ha sumido a Estados Unidos en un clima gélido en plena temporada navideña, amargando la Nochebuena a miles de personas por la cancelación y retraso de vuelos, el colapso de carreteras y los cortes de luz en varias partes del país.
La tormenta, una bomba ciclónica causada por un frente de aire ártico, está provocando desde el jueves temperaturas bajo cero desde Canadá hasta Texas, además de intensas nevadas, fuertes vientos y lluvias en casi todo el territorio.
De cumplirse los pronósticos, varias ciudades de la costa este, de Florida, Luisiana y Texas podrían vivir las Navidades más gélidas desde que se tienen registros.
Al menos 200 millones de personas en Estados Unidos, el 60 % de la población, han estado bajo alguna alerta por el clima, según el servicio meteorológico nacional, el National Weather Service (NWS).
El último parte de este organismo, de las 20.45 horas GMT, señala que 3,9 millones de personas permanecen este sábado bajo alerta por tormenta de nieve, en el medio oeste, el noreste y el noroeste del país.
Miles de vuelos cancelados
El paso de Elliot ha dejado sin Nochebuena a miles de personas que intentaban reencontrarse con sus familias, puesto que unos 4.900 vuelos han sido cancelados este sábado, según datos del portal Flight Aware.
Estos se suman a las cerca de 6.000 cancelaciones que hubo el jueves, provocando caos y desesperación en varios aeropuertos de Estados Unidos.
Los aeródromos con más afectaciones por cancelaciones y retrasos son los de Atlanta (Georgia), Denver (Colorado), Seattle (estado de Washington), Chicago (Illinois), Portland (Oregón) y Orlando (Florida). Además, están cerrados los de Milwaukee (Wisconsin), de Búfalo (Nueva York) y de Pasco (estado de Washington).
Incluso compañías de mensajería como Fedex o UPS han anunciado retrasos en la entrega de regalos a raíz de la tormenta.
El temporal también ha golpeado la infraestructura eléctrica del país, donde 700.000 personas permanecían sin luz en sus hogares a las 20.00 horas GMT, principalmente en los estados de Carolina del Norte y Maine, de acuerdo al rastreador Power Outage.
A lo largo del día llegó a haber más de 1,5 millones de usuarios a oscuras.
La compañía Duke Energy pidió este sábado a sus clientes en Ohio y Kentucky que reduzcan hasta mañana el uso de aparatos eléctricos no esenciales debido a la alta demanda de calefacción que se está experimentando por las bajas temperaturas.
Peligro en las carreteras
Al menos 15 personas han fallecido debido al temporal, según el recuento de medios locales, cuatro de ellas en un choque múltiple en una autopista de Ohio cubierta de nieve.
El servicio meteorológico advirtió este sábado de que viajar por carretera en algunas zonas del medio oeste y noreste era "extremadamente peligroso e incluso imposible", y avisó de que "los vientos helados suponen un peligro mortal para los viajeros que queden varados".
La Asociación de Automovilismo Estadounidense (AAA, en inglés) pronosticó días atrás que 113 millones de personas emprenderían trayectos de más de 80 kilómetros durante estas festividades.
Un país en alerta
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, compareció públicamente el jueves para advertir a los estadounidenses que se tomaran la tormenta "de forma extremadamente seria" y que siguieran las recomendaciones de las autoridades.
Al menos 12 estados del país han declarado el estado de emergencia por el frío gélido, como Colorado, Connecticut, Georgia o Nueva York.
"Las bajas temperaturas han dejado hoy condiciones peligrosas en las carreteras. Permanezcan fuera de las carreteras", pidió este sábado en redes sociales la gobernadora neoyorquina, Kathy Hochul.
Centenares de personas han quedado atrapadas en sus vehículos por la nieve en la ciudad de Búfalo (Nueva York), que ha tenido que cerrar los puentes fronterizos con Canadá. "Ha sido una noche muy mala para nuestra comunidad", declaró a la prensa Marc Poloncarz, funcionario del condado de Erie.
En el sur del país, centenares de migrantes durmieron a la intemperie soportando temperaturas bajo cero en la ciudad de El Paso (Texas), adonde han llegado en los últimos días tras cruzar la frontera con México.
El gobernador texano, Greg Abbot, explicó en Twitter que su estado ha registrado este viernes y sábado los días de mayor demanda energética registrada nunca en un invierno.
El viernes, los congresistas de la Cámara Baja de Estados Unidos se apresuraron a votar los presupuestos para el año fiscal 2023 con el temor de quedarse en la víspera de Navidad atrapados en Washington.
La capital estadounidense experimenta este sábado temperaturas mínimas de 13 °C bajo cero. Se espera que la ciudad pase la Navidad más fría desde 1989.