El primer ministro canadiense, Justin Trudeau, solicitó este viernes una "pausa humanitaria" en la Franja de Gaza para permitir la llegada de ayuda, a la vez que pidió la liberación de los rehenes que mantiene el grupo islamista palestino Hamás.
"Hemos visto demasiados horrores en las pasadas semanas. Niños asesinados, comunidades devastadas. No es necesario que describa el horror porque lo vemos cada noche, cada vez que abrimos las redes sociales. Todos queremos que cese. Necesitamos una pausa humanitaria", declaró en Washington, donde participó en la cumbre de la Alianza para la Prosperidad Económica en las Américas (APEP).
Trudeau añadió que es necesario, "primero, que todos los rehenes sean liberados" y que se protejan a los civiles en la Franja de Gaza "y cada vez más en Cisjordania, incluido de (la violencia de) colonos extremistas".
Según explicó, habló con el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, sobre la necesidad de que Hamás rinda cuentas por el ataque del 7 de octubre en el sur de Israel, pero también de "asegurar que se hace todo lo posible para proteger las vidas de civiles, incluidos los palestinos de Gaza y Cisjordania".
Trudeau aseguró que países como Canadá, Estados Unidos y otros están presionando a Israel para que se haga todo lo posible para proteger a los civiles palestinos pero a preguntas de los medios se negó a calificar como un castigo colectivo las acciones israelíes en la Franja de Gaza.
Por otra parte, Trudeau señaló que Egipto e Israel han asegurado a Canadá que los canadienses que se encuentran atrapados en la Franja de Gaza, unos 400 según Ottawa, podrán abandonar el enclave "en los próximos días" aunque no precisó la fecha exacta para su salida.