Al menos 260 cuerpos han sido recuperados por los servicios de emergencia israelíes del área del desierto próxima a la franja de Gaza donde cientos de jóvenes celebraban un festival de música electrónica la madrugada del sábado, cuando Hamás irrumpió disparando.
Si a estos 260 se suman los 700 que hasta ahora han registrado las autoridades de Israel, los ataques de Hamás habría causado cerca de mil muertes de sábado a domingo.
Un portavoz de ZAKA, un grupo de voluntarios que se ocupa de recuperar los restos humanos tras ataques y otros desastres, confirmó a medios israelíes que hasta ahora se han recogido más de 260 cuerpos del lugar donde se celebraba el festival de música en el sur de Israel, cerca del kibbutz Reim, próximo a Gaza.